Reyerta en el vestuario del Barça antes del Clásico que implica a Lewandowski y Ter Stegen
Ambos futbolistas se encararon por la titularidad en el Clásico
Cada día que se acerca el Clásico sube la temperatura en el vestuario del Barça. Después del varapalo en la semifinal de Champions ante el Inter de Milán, en el Giuseppe Meazza se enrarece el ambiente por quien debe ocupar la portería en el trascendente duelo de liga contra el Real Madrid en Montjuic.
Las últimas intervenciones del polaco Szczesny han dejado muchas dudas e interrogantes en el aire sobre quién debe seguir ocupando la portería culé de aquí a final de temporada. Ter Stegen disputó su primer partido después de 7 meses de lesión en el tendón rotuliano de su pierna derecha en Zorrilla ante el Real Valladolid. La idea de Flick era reservar al polaco para que no se lesionase de cara a la semifinal de Champions.
Las presiones de Ter Stegen molestan a Lewandowski
Pero en el fondo también hubo presiones de Ter Stegen por empezar a tener protagonismo, haciendo valer su fuerza y ascendencia como primer capitán del equipo. Ter Stegen ha dejado la puerta entreabierta si será ya el guardameta que aguante hasta final de temporada. El cancerbero alemán no ha hecho más que presionar para jugar desde que se le dio el alta de su lesión.
Evidentemente, esto ha sentado como un jarro de agua fría al propio Szczęsny, que ha hecho unos números más que óptimos y ha demostrado su gran capacidad bajo palos. Tampoco ha gustado a uno de los pesos pesados de la plantilla como Lewandowski, que es compatriota de Szczęsny en el vestuario. Lewandowski, harto de las presiones que está ejerciendo el guardameta alemán, se encaró con Ter Stegen para recriminarle su actitud. El germano no se lo tomó nada bien y hubo un cruce de palabras que pudo ser atajado por el resto del vestuario.
Flick, entre la espada y la pared
A todo esto, el técnico Hansi Flick se encuentra con un dilema. Vale que Szczęsny no firmó una de sus mejores noches en Montjuic y en Milán ante el Inter. En el partido de ida se comió el tercer gol de Damfries quedándose a media salida.
Pero son muchos los que creen que en momentos delicados de la temporada ha dado, sobradamente, el cayo. Ahora es Flick quien tiene la patata caliente en su tejado. Y no tendrá mucho tiempo para decidir quién alinea en el Clásico. Y todo con la gran controversia entre jugadores que ha generado este delicado debate.