¡BOMBA! Gerard Piqué dispuesto a escuchar otras propuestas.Abre las puertas
El central lleva unas semanas muy tenso con la directiva y esto puede ser la gota que colme el vaso
No están siendo los mejores momentos de Gerard Piqué como jugador del Fútbol Club Barcelona. Las cosas en el Barça van en lo deportivo. De aquella manera, pero ganando partidos y siendo líderes de la primera división. Pero van mal, muy mal, en lo extradeportivo.
EL Barcelona vive una guerra interna. Los jugadores se han hartado de la directiva. La directiva, parece, se ha hartado de las prebendas y de las peticiones de los jugadores. Creen que les han dado todo y que ahora exigen por encima de sus posibilidades. Se han convertido en niños mimados.
El vestuario se siente solo y Piqué salió a hablar sobre como no sentían el apoyo de la directiva y además, para más inri, se sentían señalados por el club. Un completo desastre si quieren conseguir los objetivos. A este paso va a ser imposible que lo hagan. Si no están juntos, o eso reclama Piqué, las cosas no van a salir mal.
Las palabras del catalán fueron tomadas por algunos como un ataque innecesario en un momento complicado. Entre ellos Leo Messi. Que a los pocos días salió diciendo que él no hubiera dicho lo que dijo Piqué. Pero que cada uno es como es.
El catalán está centrado también en sus negocios. Ahora está centrado en la Copa Davis y en que todo salga bien. Es la primera edición de este nuevo formato. La época Piqué comienza en el mundo del tenis. No sin polémica entre los tenistas por el nuevo formato. Polémica que Piqué ha ido solventando a base de reuniones con diferentes tenistas. Roger Federer y Rafa Nadal entre ellos.
Ayer dio el número de teléfono para que la gente la ayudara. Lo hizo en twitter y luego demostró que el número era el suyo. Al menos uno habilitado para ese momento. Le llegaron cientos de mensajes en cuestión de segundos. Está abierto a nuevas opciones y propuestas para que la nueva Copa Davis sea perfecta.
En el Barcelona no llevan muy bien que Piqué dedique más tiempo a sus negocios que al Barcelona. La cuerda se tensa cada vez más.