Casemiro inicia la reforma en el Madrid: Zidane y Florentino alucinan
El jugador brasileño es una pieza indispensable para los blancos
Liga, Copa del Rey o Liga de Campeones, da igual la competición. Si está jugando el Real Madrid, Carlos Casemiro es un fijo en las alineaciones. Los blancos están cuajando una de los peores temporadas de los últimos años en cuanto a títulos –ya solo tienen opciones, aunque remotas, en liga y en Champions- y en cuanto a juego, sin embargo; el jugador brasileño no para de acumular minutos en su demarcación como mediocampista defensivo, sosteniendo al equipo. Aunque es cierto que el presente curso hay poco que se pueda sostener.
El rendimiento del equipo en líneas generales está siendo más que mejorable y, con muchos pidiendo ya la cabeza del entrenador francés y buscando posible sustituto, Casemiro está siendo de lo poco salvable de la temporada merengue, junto con la recuperación y mejora de nivel de Marco Asensio. Así también lo señala un estudio de KPMG, que coloca al centrocampista como el jugador con más valor del equipo actualmente. Los grandes nombres como Hazard, muy castigado por las lesiones y con un juego que no acaba de explotar en Chamartín, o Ramos, con su contrato cerca de expirar, no están ni siquiera en un podio que completan Varane, cuyo futuro ya se está discutiendo, y Courtois.
Casemiro lleva acumulados 1215 minutos esta temporada, una media de 81 minutos de juego por partido. Zidane quiere recuperar el buen juego de años anteriores con el tridente en el centro del campo que le ha dado tantas alegrías: Modric, Kroos y Casemiro. Sin embargo, de estos tres el más indispensable es el brasileño, el míster lo sabe y por eso es el que más está jugando, pero la situación no mejora y llueven las críticas por la falta de rotaciones. Lo más grave es que en el Real Madrid no hay un sustituto para Casemiro. Ningún jugador de la plantilla reúne las cualidades para ser un recambio puro, por lo que la situación, ya alarmante, promete ser crítica al final de la temporada.
Con gran parte de la plantilla y el banquillo señalados, antes de buscar en el mercado grandes nombres y de soñar con Haaland y Mbappé vestidos de blanco, el Real Madrid deberá sentar las bases de un equipo en el que tengan cabida estos jugadores. Para ello, el equipo de Chamartín debe empezar a construir por donde sabe seguro que los cimientos podrán aguantar el peso de un club tan grande, por Casemiro.
