Diego Costa, sin equipo, espera un gran club para dar la campanada

Diego Costa, sin equipo, espera un gran club para dar la campanada

Pese a los rumores que le situaban en Boca Juniors o Manchester City, el jugador sigue sin equipo

Diego Costa es, indiscutiblemente, uno de los mejores delanteros que ha tenido en su disciplina el Atlético de Madrid. Tras salir del club como jugador libre, el hispano-brasileño está buscando equipo, y cuenta con la suerte de, al ser libre, no depender de las fechas que marcan las ventanas del mercado. Para que le puedan contratar solo es necesario que tengan fichas libres, no depende de fechas. Pero no encuentra club o, mejor dicho, los equipos a los que ha tanteado le están rechazando.

Diego Costa

Ha habido rumores sobre las diferentes opciones que le han interesado al delantero, una de ellas ha sido el City de Guardiola, los periódicos ingleses hablaban de una posibilidad de incorporación a la disciplina skyblue hasta fin de temporada. A priori, encajaba perfectamente en las necesidades del equipo Cityzen, tal y como el club había publicado: bueno, bonito y barato. Los murmullos que apuntaban a esta posibilidad se silenciaron inmediatamente cuando el de Santpedor dejó claro que no valoraban esa incorporación. También se le había vinculado, desde el Reino Unido, con el West Ham, pero los Hammers también lo han descartado.

Otra de las posibilidades que se publicaba, esta vez desde ESPN en sudámerica, era que recalase en el Boca Juniors, para conjuntar con otros delanteros que actualmente tampoco tienen equipo como Alexandre Pato o Daniel Sturridge, de hecho, esta opción se hacía cada vez más fuerte según se acercaban las 12 de la noche. También ha habido otras informaciones, quizá menos creíbles, que situaban a Costa en la Juve o en el Fenerbahçe.

Para ofrecerse a los equipos que le quieran contratar, Diego tiene un magnífico currículum que incluye los números que arrojan sus actuaciones en los últimos tres años: casi 5.000 minutos en 74 partidos, 17 goles y 14 asistencias. A estos guarismos hay que añadir los intangibles que genera tener un jugador como Costa en el equipo porque aporta fiereza, intensidad, brío, sostiene y levanta anímicamente al equipo.

Teniendo esto en cuenta, seguro que pronto vemos al delantero de 32 años de nuevo en los terrenos de juego y, si las lesiones le respetan, marcará más goles y se enfrentará de nuevo a los colegiados en los partidos. Desde luego no se siente un futbolista retirado, y está convencido de conseguir recalar en un club importante, en Europa o en América