Era cuestión de tiempo y Simeone se lo anuncia al club: el final
Muchos en el club se temían la petición desde hacía meses
En el Atlético de Madrid sabían qué era algo que podía ocurrir. El entrenador rojiblanco llevaba tiempo mostrando su falta de interés en Saúl Ñíguez, pese a que el centrocampista estaba llamado a ser uno de los emblemas del club vistas sus primeras temporadas en el equipo capitalino.
Desde 2014 lleva Saúl a las órdenes del Cholo en el Atlético, cuando el club le recuperó tras un año de cesión en el Rayo Vallecano donde destacó por encima del resto y se ganó su oportunidad en el equipo campeón de LaLiga aquel año y que por entonces todavía jugaba en el Vicente Calderón. Pero su estrella, que comenzó brillando y de qué manera, empezó a perder luz la temporada pasada hasta llegar a apagarse a lo largo de la presente campaña.
Simeone, ante la falta de regularidad de Saúl, optó por utilizarlo como lateral zurdo, algo que el ilicitano detesta y que ha dejado ver en más de una ocasión manifestándose en contra, lo que no ha gustado nada a su entrenador, todo sea dicho. Pero más allá de las diferencias que puedan haber surgido entre ambos, el Cholo no le quiere en la plantilla por razones estrictamente deportivas. Simeone cree que Saúl no volverá a tener el nivel que mostró en sus primeras campañas como jugador atlético y le ha pedido al club que intente sacar tajada por él para reforzarse con un centrocampista que si alcance los mínimos que el mister exige.
En el club se temían que esto podía llegar y saben que no será una decisión fácil de explicar. La afición adora al canterano y ver como uno más de sus chicos se marcha del club levantará más de una crítica contra Simeone y contra la directiva por dar el ok a su petición. Por el momento, nada es público y se intentará llevar con la mayor discreción posible, pero que Saúl es jugador transferible y que si aparece alguna oferta interesante el club le dará salida es ya una realidad.
Simeone deja claro con esta decisión que seguirá, al menos, un año más al frente de la nave atlética, lo que supondrá que el argentino superará la barrera de los 10 años como entrenador atlético, ahí es nada.