Ernesto Valverde paraliza una salida cantada en el Barça

Ernesto Valverde paraliza una salida cantada en el Barça

El extremeño quiere retener a un jugador

Ernesto Valverde aprovechó el amistoso ante el Chelsea, que se saldó con derrota del Barça, aunque dejó buenas sensaciones, para ver en acción a los nuevos fichajes, darle oportunidad a los canteranos y poder seguir a los menos habituales. El extremeño tomó nota de la actuación de cada uno para decidir su futuro y varios nombres le sorprendieron gratamente.

El que más, Rafinha Alcántara. El hispano-brasileño regresó a los terrenos de juego tras la grave lesión que sufrió el curso pasado, rompiéndose los ligamentos, la segunda que tiene en su corta carrera. Y el hermano de Thiago aprovechó los minutos que tuvo para demostrar que, siempre que le respeten las lesiones, puede ser un jugador muy aprovechable.

Situado como falso nueve, una posición que no es desconocida para él, pues ya jugó allí en el filial, creó peligro, distribuyó juego y se asoció muy bien. Sin duda, fue de lo más destacado de la segunda mitad. El ‘12’ se ganó elogios e hizo replantearse su futuro a la directiva y al ex entrenador del Athletic Club, que tenían más que decidido darle salida en este mercado estival.

Su venta al Valencia estaba prácticamente acordada a cambio de poco más de 15 millones de euros. Solo faltaba cerrar unos pequeños flecos con los ‘chés’ para que se mudara a Mestalla, por petición expresa de Marcelino García Toral, que lo tenía en su lista de objetivos prioritarios.

Ahora, las cosas podrían haber sufrido un giro radical. El trato se ha congelado, ya que Valverde quiere seguir viendo sus evoluciones en los propios amistosos. Si sigue rindiendo así, no descarta quedárselo por delante de Carles Aleñá, que sería cedido a otro equipo de la Liga Santander, previsiblemente al Eibar, o como teórico suplente de Luis Suárez, jugando como punta.

Pronto deberán decidir, pues en Valencia meten prisa.