Es el mimado de Florentino Pérez: el vestuario del Real Madrid explota

En el vestuario del Real Madrid están hartos de los favoritismos que hay en la plantilla. Y los primeros han sido los jugadores que están esperando una renovación, como Luka Modric o Sergio Ramos. Pero no son los únicos, pues hay muchos otros cansados del trato de favor de Florentino Pérez hacia algunos futbolistas, como Vinicius Junior, Eder Militao o Rodrygo Goes, hasta hace poco. Todos habían sido apuestas personales suyas, y no paraba de darles nuevas oportunidades.

Pese a que no han demostrado el nivel necesario, en especial, los dos primeros, no escuchaba las ofertas que llegaron por ellos, y no les dejó salir. Y tampoco acababan de entender el trato de Zinedine Zidane con piezas como Isco Alarcón o Marcelo, que estaban contando con minutos, que no se habían ganado. Aunque, ahora, el que ocupa todas las miradas y acumula todo el odio es Martin Ödegaard, que regresó al club este verano, tras una serie de cesiones.

Pasó por el Herenveen, el Vitesse Arnhem y, finalmente, la Real Sociedad. Allí, en La Liga Santander, demostró de todo lo que es capaz, y se erigió como uno de los mejores futbolistas de la competición. Algo que le sirvió para regresar al Santiago Bernabéu, donde en su día llegó con el cartel de gran promesa, y uno de los talentos con más potencial de todo el panorama internacional. Pero ha decepcionado, francamente, a absolutamente todos.

Apenas acumula 367 minutos repartidos en nueve encuentros, y no ha marcado ni un solo gol ni ha dado una asistencia. El internacional noruego no ha hecho méritos como para quedarse, pero el presidente no tiene la más mínima intención de deshacerse de él. Sigue confiando en sus habilidades, y cree que tarde o temprano se asentará en el once inicial, por lo que sigue pidiendo al técnico francés que le dé oportunidades. Y hay algo que se esconde detrás de todo.

Según ha llegado a Don Balón, la verdadera razón es porque confía en que pueda acercar a su compatriota Erling Braut Haaland. En la plantilla, aún y así, no tragan a Odegaard.

Tiene detractores.