El escándalo de Coutinho (y es brutal) del que el Barça prohíbe hablar

El escándalo de Coutinho (y es brutal) del que el Barça prohíbe hablar

No se ha dicho todo sobre el '7'

De Coutinho ya está todo dicho. El internacional brasileño es un cero a la izquierda y en el Barça está vetado de por vida. Su decepcionante actuación ante el Liverpool fue la gota que colmó un vaso con litros de capacidad, porque más paciencia con el ‘7’ es imposible tener.

Su rendimiento no es digno de un jugador profesional. No corre, no presiona, no ataca, no defiende, pierde balones, no va al balón dividido… un pre benjamín haría igual o mejor las funciones del ex jugador ‘red’.

Para colmo, no hace autocrítica y vive en una nube. No tiene ninguna intención de cambiar sus hábitos, su rutina, su dieta o de hacer algo que pueda influir positivamente en su rendimiento. En lugar de eso, se refugia e intenta convencerse a sí mismo de que no tiene la culpa de nada.

Por eso mismo, le cuesta entender los pitos y abucheos, más que justificados, de la afición cuando toca el esférico. Una grada que pide su salida inmediata, no solo por su paupérrimo nivel, que también, si no por los insultos que les profirió al marcar al Manchester United. Pero lo que más duele de Coutinho no es eso.

El escándalo que más escuece en el vestuario y en las oficinas está relacionado con el dinero. Primero, por los 160 millones de euros que desembolsaron por él hace poco más de un año.

El ‘canarinho’ puede presumir de ser el fichaje más caro de la historia del Barça. Un dineral tirado a la basura, y que se podría haber invertido en traer a futbolistas más valiosos a la plantilla.

Eso ya se da por perdido. Saben que ningún club, a día de hoy, pagará ni siquiera una cantidad similar por él. Lógico. Pero hay más números. Concretamente, los referido al sueldo y las primas de fichajes.

13,5 ‘kilos’ es lo que se embolsa el jugador por cada campaña que tiene firmada en el Camp Nou. Una burrada que no gusta entre la plantilla, ya que no se merece cobrar más que algunos puntales como Ter Stegen, Piqué, Jordi Alba, Rakitic o Busquets.

 

Y además dificulta enormemente su salida…