Florentino pasa del PSG y de los 100 millones y elige destino a Kubo
El Madrid rechaza el dinero por el japonés
El PSG quiere fichar a Takefusa Kubo y hacerle parte del megaproyecto que Nasser Al-Khelaïfi va a montar en París. El presidente del club parisino va a dar un paso hacia adelante y para ello quiere al joven jugador en sus filas. Florentino sabe desde hace dos meses que el equipo de la capital francesa presentará una oferta millonaria por el extremo japonés, pero la respuesta será un `no´. Y es que ni los 100 millones que dicen desde Francia que ofrecerá el conjunto que entrena Tuchel van a convencer a Florentino, que ya ha elegido destino para Kubo: la Real Sociedad.
La idea del Real Madrid es hablar con el jugador y explicarle su situación. Zidane quiere que de nuevo haga la pretemporada con el primer equipo, no para verle y valorarle pues ya sabe todo lo que tiene que saber, sino para que el propio Kubo se empape de los jugadores de la plantilla del Madrid y continúe con su aprendizaje. Una vez finalice la pretemporada se uniría a la Real Sociedad en forma de cesión.
El ejemplo de Odegaard
El equipo vasco está exprimiendo a Martin Odegaard y la dirección deportiva del Real Madrid, con Florentino a la cabeza, están más que contentos con la evolución del jugador noruego en San Sebastián. Por esta razón quieren y desean desde Madrid que Kubo tenga el mismo rol que ha tenido desde que llegó a la Real el internacional con Noruega, un papel principal que le sirva para acumular experiencia y seguir demostrando que será un jugador de provecho para el Real Madrid en un futuro no muy lejano.
Kubo ha hecho un año espectacular en Mallorca, y lo ha hecho pese a que el equipo que entrena Vicente Moreno está casi desahuciado y bajará con casi toda seguridad a Segunda División. El jugador ha sido el mejor del equipo bermellón y ha llamado la atención de todos por su madurez y por su sacrificio en el terreno de juego.
El PSG soñaba con que 100 millones serían suficientes para sacarlo de Madrid, pero Florentino ha visto en él un jugador con carisma y futuro y no le dejará marchar.
Para el presidente blanco, Kubo vale más de 100 millones.