Jugó con Romario (y acaba de morir en la indigencia a los 36 años y en la calle)

El futbol, la fama, los títulos, el dinero, los éxitos… no todos los futbolistas tienen una carrera soñada. Y, por desgracia, cada vez son más los casos de jugadores que acaban en la miseria o con problemas mentales.

Difícil de olvidar es el caso de Robert Enke, guardameta alemán que pasó por el Barça y que era leyenda en el Hannover y habitual en la selección alemana, que decidió quitarse la vida en 2009, con 32 años.

Otro caso sonado es el de Adriano ‘El Emperador’, llamado a ser el sucesor de Ronaldo Nazario. En el Inter dejó muestras de su calidad, pero nunca pudo superar la muerte de su padre, asesinado en su Brasil natal.

Ahora, es narcotraficante de drogad y armas en las favelas brasileñas y luce un aspecto muy descuidado. Pero el protagonista de hoy es Valdiram Caetano, otro brasileño, que llegó a jugar con Romario, leyenda culé, en el Vasco Da Gama.

Con solo 36 años, el exjugador fue hallado muerto y con signos de violencia en las calles de Sao Paulo. Apodado como ‘el chico malo’, Caetano destacó más por sus historias fuera del campo que sobre él.

Antes de llegar al Vasco ya contaba con antecedentes por varias acusaciones sexuales y delitos relacionados con las drogas. Pasó por nada más y nada menos que 18 clubes diferentes, hasta que su trayectoria tocó fondo a causa de su adicción al alcohol y las drogas. Incluso llegó a robar a varios excompañeros.

Sin casa, sin familia y sin dinero, fue ingresado a una clínica de desintoxicación. Pero ni así. Nunca pudo dejar atrás sus adicciones y sus problemas, hasta el pasado fin de semana, en el que se localizó su cadáver.

DEP.