La gran petición de Ronald Koeman está cada vez más cerca del Barça

La situación del Liverpool no invita al optimismo para nada. Ahora mismo, son octavos en la Premier League, y parece muy complicado, por no decir imposible, que vayan a lograr clasificarse a la próxima edición de la Champions League. Pero es que incluso corren el riesgo de quedarse fuera de competiciones europeas, si es que no logran revertir la situación próximamente. Y, con las numerosas lesiones con las que cuentan, parece realmente complicado pensar eso.

No han tenido suerte con ese aspecto, e incluso se debate acerca del futuro de Jürgen Klopp, y de varias piezas como Mohamed Salah, Thiago Alcántara o Roberto Firmino. Pero hay un futbolista, que es titular habitual, y que sí que parece que hará las maletas al final del curso, independientemente de lo que suceda. No es otro que Georginio Wijnaldum, que acaba contrato, y que todavía no ha renovado. Y desde el día uno de enero puede negociar con otros clubes.

El internacional neerlandés tiene una experiencia muy importante a sus espaldas, a sus 30 años. Pero sigue estando a un buen nivel, teniendo un gran poderío físico y una tremenda capacidad de recuperación y de despliegue. En Anfield llevan tiempo haciendo todo lo posible para lograr su firma, pero se ha complicado enormemente. Más, ahora, con la crisis de resultados que atraviesan. Y es una oportunidad única para el Barça.

Ronald Koeman lo pidió el pasado verano, pero no fue posible ficharle por el pacto de no agresión que tienen con los ‘reds’. En cambio, ahora no tendrían que negociar con nadie, solo con el ex del Feyenoord Rotterdam, el PSV Eindhoven y el Newcastle United. Y, obviamente, estaría encantado de probar suerte en La Liga Santander, y reencontrarse con el que fuera su entrenador en la selección de Holanda. Sería el compañero de Frenkie de Jong, otro compatriota, en la sala de máquinas.

Joan Laporta se lo está pensando seriamente, pues sería completamente gratis, y encontraría al centrocampista con piernas que tanto necesitan. Miralem Pjanic no ha cuajado, Sergio Busquets está acabado, y casi no disponen de efectivos en ese puesto.

Lo único que le preocupa es tapar la progresión del joven Ilaix Moriba.