Los números de Martin Braithwaite que dejan en ridículo a Eden Hazard

Los números de Martin Braithwaite que dejan en ridículo a Eden Hazard

La comparativa entre uno y otro asusta

Eden Hazard fue uno de los protagonistas en el pasado encuentro del Real Madrid, frente al Inter de Milán. Abrió la lata con su gol desde los once metros, y despejó el camino de los de Zinedine Zidane para sumar los tres puntos, y sellar, prácticamente, su pase a los octavos de final. Aunque tampoco se puede decir que fuera una actuación brillante, ya que en largos tramos del encuentro pasó desapercibido, y estuvo desaparecido.

Todavía se le ve falto de ritmo competitivo, y necesita mucho más para poder exhibir su mejor versión. Esa que siguen esperando, y que no muestra desde que salió del Chelsea. Las lesiones no le dan un respiro, y no está teniendo suerte. Para colmo, también fue muy criticado por llegar fuera de forma, y le piden que asuma más responsabilidades. Y costó mucho más de lo que se dijo en un principio, concretamente, 160 millones de euros.

Por el momento, ya suma más dianas que el curso anterior, en el que solo vio puerta en una ocasión. También es cierto que solo lleva un par, y que una de ellas ha sido desde el punto de penalti. Pero está claro que sigue resultando insuficiente, y que le exigen bastante más. Sobretodo, porque, haciendo una comparativa con Martin Braithwaite, el delantero suplente del Barça, y cuya llegada generó tantas bromas y risas, sale perdiendo el canterano del Lille.

Y es que Hazard ha jugado 287 minutos, mientras que el internacional danés solo ha estado sobre el terreno de juego en 134. Aún y así, llevan los mismos goles, y uno de penalti para cada uno. Es decir, que por estadística, el ex de Leganés, Middlesbrough, Toulouse o Girondins de Burdeos necesita bastante menos tiempo para marcar. Y encima, él puede presumir de haber dado una asistencia a alguno de sus compañeros, algo que el belga no.

Resulta entendible, por lo tanto, que Florentino Pérez pida mucho más al ‘7’, que llegó para ser la gran estrella del equipo. De momento, sigue sin carburar. Y la paciencia ha llegado a un límite que comienza a agotarse del todo.

Veremos.