Uno de los mejores centrales del mundo se encuentra sin equipo desde ayer

Uno de los mejores centrales del mundo se encuentra sin equipo desde ayer

El jugador busca nuevo proyecto y es codiciado

Ezequiel Garay es desde ayer libre y puede negociar con el equipo que quiera. Ya podía hacerlo de hecho desde el pasado mes de enero, pero ahora puede hacer oficial su contrato con el club que desee. El Valencia, que ha tenido un comportamiento pésimo con el jugador, le dejó libre ayer al no activar el año de contrato que tenía el argentino. La cláusula dependía del club y decidieron no hacerla efectiva aprovechando la lesión de larga duración del jugador.

Llegó en 2005 a España

Garay es un central con mucha experiencia. Llegó a LaLiga hace 15 años procedente de Newell´s. Su primer club en España fue el Racing de Santander. En el equipo cántabro hizo tres temporadas bárbaras que le sirvieron para firmar por el Madrid previo pago de su cláusula, 10 millones.

Como jugador blanco disputó 31 partidos en las dos temporadas que estuvo en el club. Competía con Pepe y con Sergio Ramos, pero hizo buen trabajo en los partidos que disputó. Mourinho le tenía en cuenta en la rotación de un equipo que estaba preparándose para hacer historia años más tarde.

Subcampeón del mundo con Argentina

Del Madrid se fue al Benfica y tras un breve paso por Rusia llegó al Valencia. En el club che ha madurado como jugador y ha sido internacional de manera habitual. Formó parte del plantel que casi sale campeón del mundo en 2014 y tuvo un rol importante, pues jugó todos los minutos de la competición.

Ahora a sus 33 años y con una lesión de rodilla grave busca nuevo proyecto. Garay quería quedarse en España un par de años más antes de probar suerte en Estados Unidos. Pellegrini, que va a firmar con el Betis, le conoce bien de su etapa en el Madrid y puede ofrecerle una oportunidad. Otros equipos como el Valladolid o el Celta también le pretenden.

Su experiencia está muy bien valorada y además el mal trato del Valencia hacia él ha hecho que sea un jugador todavía más deseado.