Messi lo echa del Barça (y es titular): lío en las últimas 24 horas

El Barça ha fijado precio de salida a Samuel Umtiti, al que se le busca relevo, y por el que escuchan ofertas que ronden los 60 millones de euros, para financiar y acometer nuevas incorporaciones galácticas que den un salto de calidad en la plantilla.

Su temporada ha sido especialmente mala, a excepción de los dos primeros meses, en los que estuvo a su nivel habitual. Pero una lesión en octubre frenó su progresión en seco y, desde ese momento, no ha habido más que problemas. Y no es para menos.

Desde la directiva y el ‘staff’ técnico aconsejaron al franco-camerunés pasar por quirófano para que no hubiera problemas en su recuperación. Querían asegurarse que regresaría lo antes posible y al 100%, y que las posibilidades de recaer fueran mínimas.

Un consejo que ‘Sam’ descartó. Prefirió evitar operarse y hacer un tratamiento conservador por su cuenta, algo que no sentó nada bien en el Camp Nou. Y menos aún cuando veían que los plazos no avanzaban como estaban previstos y su rehabilitación se retrasaba y se volvía cada vez más lenta.

Finalmente, no le quedó otra que hacerse la cirugía, por lo que no pudo regresar a los terrenos de juego hasta, prácticamente, medio año después. Y lo hizo completamente fuera de forma y lejos de su mejor nivel.

Para colmo, su reemplazo, Clément Lenglet, había rendido a un gran nivel durante su ausencia, lo que provocó que Umtiti tuviera que ver los partidos desde el banquillo cuando regresó. Algo que no le hizo ni pizca de gracia, como era de esperar, pero es que cuando estuvo en el césped dejó mucho que desear y evidenció estar lejos de su nivel óptimo.

Aun y así, el campeón del Mundo quiere seguir en el Barça y ganar la Champions League allí. Pero en Barcelona tienen otros planes, y prefieren hacer caja con él, antes de que su valor de mercado caiga aún más, y traer a otro crack para la defensa. 

Que mal huele…