Messi no da crédito: Griezmann lo tapa. El otro lío culé

El FC Barcelona está en estado de ebullición. El vestuario azulgrana está que echa humo con su entrenador Quique Setién por sus desplantes, con el segundo Eder Sarabia por su carácter y hay jugadores que no entienden nada de lo que está sucediendo como Antoine Griezmann por el que pagaron más de 100 millones de euros el verano pasado para que luego solo lo saquen para perder tiempo en un partido que debería ser decisivo.

La familia de Griezmann ha clamado contra Quique Setién y desde la directiva del Barça parece que comienzan a estar preocupados por lo que pueda suceder con el jugador galo. De hecho, comienza a sonar para salir en el mercado de verano. 

Sin embargo, dentro del vestuario están con Griezmann, incluso Leo Messi y Luis Suárez, quienes a principio de temporada fueron muy reacios a la llegada de un jugador que ya había hecho un feo al Barça el verano anterior. 

Y es que el propio Leo Messi cree que la directiva del FC Barcelona debería preocuparse antes por otros jugadores como Ousmane Dembélé o Philippe Coutinho, auténticas ruinas para la entidad catalana que han acabado mermando la capacidad para fichar del equipo en los últimos mercados.

Messi y su entorno esperan que desde el club se pongan las pilas y en lugar de buscar brujas en Antoine Griezmann, en quien se están fijando ahora, deberían solucionar antes que nada la venta de un Ousmane Dembélé que debería ayudar a traer al internacional brasileño Neymar de vuelta al Camp Nou, aunque eso sea algo que no todos los barcelonistas estarían dispuestos a ver.

Desde el club podrían tomar decisiones sensibles antes de que lleguen los partidos de Champions League, y uno de ellos podría ser la salida inminente de un Quique Setién que no ha caído en gracia en el Barça.