Mientras todo se derrumba, el Barça ve como se pierden 145 millones

Mientras todo se derrumba, el Barça ve como se pierden 145 millones

El jugador no está ni se le espera, el club da por perdida la inversión

El futbolista brasileño Philippe Coutinho aterrizó en Can Barça en invierno de 2018 a cambio de la nada despreciable cantidad de 145 millones de euros, que es lo que se pagó al Liverpool a cambio del jugador. Desde ese momento parece que a Coutinho le cambió la suerte totalmente, pasó de ser un jugador que maravillaba a toda Europa a ser un futbolista mediocre, que no aportaba nada y, además, proclive a las lesiones. El Barça, siendo consciente de la presión que soportaba el jugador, decidió que la temporada 19/20 la jugase cedido en el Bayern de Munich.

Coutinho

Estando en el club alemán, los números del brasileño empezaron a mejorar, pero nunca fueron los que tuvo en la premier, y la puntilla para el Barça fue que participó en dos goles de la vergonzante derrota frente al Bayern por 8-2. En su última temporada en la Premier, Coutinho jugó 36 partidos y anotó 14 goles, además repartió 9 asistencias. Estos datos son muy superiores comparados con los que ha tenido en todo el tiempo que ha estado en la plantilla del Barça, ya que, en dos temporadas y media, ha participado en 68 encuentros, con 14 tantos y repartiendo 7 pases de gol. Como decimos, la temporada que estuvo en la Bundesliga fue algo mejor, ya que hizo 11 goles en 38 partidos, también dio 9 asistencias.

Pero el drama real no está en el rendimiento del jugador, que es muy pobre, sino en las cantidades que se pagaron por él y la caída en picado del valor del futbolista, que hace imposible recuperar ni tan solo un tercio de lo invertido en Coutinho. Lo que para las arcas del club blaugrana es un desastre, ya que se necesita liquidez inmediata y, por tanto, vender jugadores, pero, al menos en el caso del brasileño, si se deprecian tan rápido no es posible apenas recibir ingresos. En tres años, Philippe Coutinho ha pasado a estar valorado en menos de 50 millones de euros, según Transfermarkt, lo que quiere decir que, si alguien pagase esos 50 kilos, el Barça seguiría perdiendo 95 millones.