No agrada como sustituto de Alaba y Militão y llega la sentencia: será el KO más duro de Florentino

No agrada como sustituto de Alaba y Militão y llega la sentencia: será el KO más duro de Florentino

El presidente no pondrá sobre la mesa una oferta de renovación

La temporada del Real Madrid se vio complicada a las primeras de cambio con las lesiones de Thibaut Courtois y Éder Militão, pero en el pasado mes de diciembre esto se agravó mucho más para Carlo Ancelotti con el percance sufrido por David Alaba en el duelo ante el Villarreal celebrado en el Santiago Bernabéu.

Tras esto, el propio entrenador italiano confirmó que Florentino Pérez no buscaría un refuerzo en este mes de enero aprovechando el mercado invernal, pero este problema está comenzando a generar dolores de cabeza en Concha Espina ya que, si bien el rendimiento de Antonio Rüdiger está rozando la perfección, Nacho Fernández no puede presumir de lo mismo.

Nacho

Partiendo como cuarto central de la plantilla a principios de temporada, el español se vio obligado a dar varios pasos adelante cuando se confirmaron los peores pronósticos con Militão y Alaba, pero a decir verdad sus prestaciones están dejando mucho que desear.

No mostrando la misma fiabilidad y contundencia que durante toda su trayectoria en el club, Nacho firmó una de sus peores actuaciones de los últimos años el pasado domingo antes el Almería en lo que solo ha hecho que confirmar esas dudas de Florentino Pérez respecto a su futuro, dudas que han terminado propiciando una decisión irrevocable en las oficinas blancas: el jugador vivirá sus últimos meses en el club.

Nacho Fernández acaba contrato el próximo 30 de junio y, aunque sus prestaciones en la temporada pasada terminaron convenciendo a Florentino para ofrecer la renovación por un año, está claro que su caída en picado ya ha comenzado y el club optará por buscar un refuerzo en el mercado el próximo verano.

Dolorosa sentencia y emotiva despedida

Eso sí, que Nacho esté atravesando un momento complicado no evitará que el jugador de 34 años tenga una despedida acorde a su trayectoria en club, siempre servicial para sus entrenadores sin generar ningún problema a pesar de no haber gozado de la titularidad sistemática en muchas de sus campañas defendiendo la elástica blanca, algo clave para ganarse el cariño y admiración de los aficionados.