No cuenta para Hansi Flick y ya prepara las maletas, podría dejar el Barça en cualquier momento

Un jugador clave en la plantilla, fuera de los planes de Flick y con un futuro incierto en el club

No cuenta para Hansi Flick y ya prepara las maletas, podría dejar el Barça en cualquier momento

El Barça se alista para su gira asiática. Tres partidos amistosos en Kobe, Seúl y Daegu marcarán el inicio de la era Hansi Flick. Pero no todos formarán parte del nuevo proyecto. Hay un nombre que está muy cerca de quedarse fuera. Su ausencia en la lista de convocados, que se dará a conocer este jueves, lo dice todo.

No es un canterano sin espacio. Tampoco un fichaje reciente con margen de mejora. Es un jugador experimentado, que volvió al club como solución temporal tras la marcha de una leyenda. Pero no ha funcionado. Su rendimiento fue cayendo con el paso de los meses. Y con el cambio de entrenador, su situación ha empeorado aún más. Todo apunta a que su futuro en el club está sentenciado.

Camino a la salida

Hablamos de Oriol Romeu. El centrocampista catalán, de 34 años, está muy cerca de cerrar su etapa en el Camp Nou. Volvió el pasado verano procedente del Girona. Lo hizo con una misión clara: cubrir la vacante que dejó Sergio Busquets. Pero no logró consolidarse. Jugó 37 partidos con Xavi, sí. Pero su peso en el equipo se fue diluyendo. Ahora, con Flick al mando, tiene por delante a De Jong, Gavi, Pedri, Casadó… incluso al joven Marc Bernal. No entra en los planes y lo sabe.

Con un año más de contrato, Romeu ya está valorando la opción de rescindir. Las conversaciones existen. El principal escollo es económico: cuánto recibiría por el año pendiente. Aun así, todas las partes están por la labor de encontrar una solución pactada. Mientras tanto, los pretendientes no faltan. El Girona lo recibiría con los brazos abiertos. Allí brilló a las órdenes de Míchel y fue clave en su sistema. También el Valencia ha mostrado interés, tras la salida de Barrenechea.

Romeu quiere seguir compitiendo. Y hacerlo en La Liga, si es posible. Sabe que aún tiene fútbol en sus botas. Pero en el Barça ya no tiene sitio. Su salida parece cuestión de tiempo y el reloj ya está corriendo.  Todo indica que su etapa como azulgrana se cerrará de forma discreta, sin ruido, pero con el punto final ya escrito.