Y no es Isco: el jugador del Real Madrid que será vecino de Messi

Y no es Isco: el jugador del Real Madrid que será vecino de Messi

Una estrella se muda a Barcelona

Brahim Díaz ha sabido convencer en estos últimos duelos de la temporada a Zinedine Zidane, Florentino Pérez y a la afición del Real Madrid de su enorme potencial y su gran calidad.

Reclutado en enero procedente del Manchester City de Pep Guardiola, varias voces señalaban que el malagueño, considerado uno de los mayores talentos del futbol español, era en realidad un globo hinchado y que nunca podría asentarse en el cuadro blanco.

Y lo cierto es que el miedo inundó el cuerpo de los madridistas al ver como el de Dos Hermanas no jugaba ningún papel importante con Solari en el banquillo. El técnico argentino apenas le dio unos pocos minutos, siempre entrando desde el banquillo, muchas veces con el marcador decidido, en los que el ex del Málaga se mostraba tremendamente nervioso, indeciso, impreciso y fallón.

Se le veía muy ‘verde’ y muchos se preguntaban si era un acierto o un pufo. Además, criticaban a Florentino haber pagado casi 20 millones de euros por un jugador que, a sus 19 años, apenas había disputado unos cuantos minutos en la élite y que podría haber aterrizado gratis en verano, puesto que su contrato en el Etihad Stadium expiraba.

Pero, tras ver los últimos recitales del ‘21’, ya nadie discute esa decisión al presidente del Real, que lo tenía todo planeado. Quiso que el hispano-marroquí se adaptara lo antes posible al equipo, a la ciudad y a la presión que supone jugar en el Santiago Bernabéu. Y, aunque le ha costado, lo ha conseguido.

Zidane le ha dado oportunidades y Díaz las ha aprovechado, dejando grandes destellos. De hecho, se especulaba con la posibilidad de que siguiera un año más en el Madrid, a pesar de que su fuga, hasta hace bien poco, se daba por hecha.

Sin embargo, y pese a su gran papel, ‘Zizou’ sigue siendo partidario de cederle a otro conjunto de Primera División en el que pueda hacer de las suyas jornada tras jornada, y no una vez cada cinco encuentros.

Su cesión al Espanyol está pactada y ya busca casa en Barcelona, concretamente en Castelldefels. Brahim seguirá los pasos de Asensio, con el sueño de volver a Chamartín más pronto que tarde a hacer historia.

No le quitarán el ojo de encima.