¡Pep Guardiola se lo roba a Florentino Pérez y Messi! Y es un 3x1 sorpresa

David Alaba de nuevo era colocado en la agenda de Barça y de Real Madrid en los últimos días, después de unos meses en los que había dejado de sonar. Y es que lo cierto es que su rendimiento en el Bayern de Múnich no está siendo impresionante, y está lejos de su mejor versión, esa que ofreció hace unas cuantas temporadas. Se ha estancado, pero sigue siendo uno de los mejores laterales zurdos del planeta.

Y, por supuesto, es indiscutible en el gigante bávaro, más si cabe tras la plaga de lesiones en la zaga, que se ha llevado por delante a Lucas Hernández, su gran competidor, y a Niklas Süle. Pero el verdadero motivo por el que había llamado la atención de los mejores clubes de Europa es por el hecho de que su contrato finaliza en junio de 2021.

Y, de momento, ni hay acuerdo para renovar ni está cerca de haberlo. Las conversaciones están paralizadas, y el internacional austríaco ha avisado de que, a no ser que le presenten una oferta irrechazable, por su cabeza pasa muy seriamente la posibilidad de cambiar de aires. Quiere conocer una nueva competición, y dejar la Bundesliga, y enrolarse en un proyecto que sí le garantice pelear por la Champions League. 

Un torneo que levantó en el 2013, pero, desde entonces, ni siquiera ha estado cerca de volver a hacerlo. Está harto. Obviamente, tanto el cuadro culé como el cuadro blanco sí le pueden prometer eso, además de un buen salario. Y su polivalencia, que le permite jugar de lateral, de mediocentro o incluso de central, era muy bien valorada en la directiva.

Pero parece ser que es el Manchester City de Pep Guardiola, que ya lo tuvo a sus órdenes, el equipo que tiene la ventaja. Porque, a diferencia de Barça y Madrid, sí le garantiza la titularidad, pues Benjamin Mendy no acaba de asentarse y tiene problemas serios con las lesiones.

Su precio, unos 55 millones de euros, aproximadamente.