Un primer curso complicado para Ronaldo

Un primer curso complicado para Ronaldo

Así ha sido su nueva andadura

Con el inicio de la campaña pasada surgió una noticia que sorprendió a todos los seguidores de la liga española. El mítico Ronaldo Nazario iba a comprar un club de la liga Santander por 30 millones, sin tener ningún vínculo con el mismo aparentemente. El objeto de deseo del brasileño fue el Real Valladolid.

Los primeros meses por tierras castellanas fueron bastante placidos para el nuevo propietario de la entidad. Su nuevo equipo realizó un brutal arranque de temporada llevando a los pucelanos a disfrutar de las plazas europeas, incluso consiguiendo situarse en segunda posición.

La llegada del exjugador del Real Madrid a la provincia vallisoletana sorprendió y agradó por partes iguales a unos aficionados que se ilusionaron por el hecho de que una figura de las magnitudes de Ronaldo se hubiera interesado por un club tan modesto como el Real Valladolid. 

Aunque no todo iba a ser un camino de rosas. Con el arranque de la segunda vuelta, los pucelanos se encontraron inmersos en una dinámica muy negativa de resultados que llevo al conjunto blanco y violeta a sufrir los puestos de descenso durante un periodo demasiado largo de tiempo.

Por suerte para la entidad y para el máximo dirigente, los vallisoletanos consiguieron la ansiada permanencia en la penúltima jornada de la segunda vuelta en el campo del Rayo Vallecano, certificando de manera matemática su participación en primera división la siguiente campaña.

Aunque no todo iba a quedar ahí. Después de caer derrotado por el Valencia 0-2 en un partido en el que los locales no se jugaban nada, la policía abrió una investigación sobre el amaño de partidos en la que se acusaba a varios jugadores del Valladolid por supuestamente haber perdido a cambio de dinero. En concreto, Borja Fernández y Keko serían los más perjudicos.

La pasada semana el juez abrió el secreto de sumario, sin pruebas que constaten que ningún jugador del Valladolid se encontrase inmerso en la trama. Finalmente, en un año de luces y sombras, Ronaldo puede irse de vacaciones tranquilo con su equipo en primera y libre de ningún escándalo que manche su mandato.