Quiere volver al Madrid y ¡tiene el visto bueno de Ramos!

El Real Madrid sigue buscando moverse en el mercado de fichajes dada la inactividad en el ámbito deportivo que se va a prolongar como mínimo hasta finales de abril. Una de las mayores preocupaciones en el palco del Santiago Bernabéu es renovar la plantilla en los puestos en los que se cuenta con jugadores veteranos, como es el caso de Sergio Ramos, Luka Modric o Marcelo. El lateral izquierdo ha sido suplido por Mendy con un gran rendimiento, pero desde Chamartín piensan en un viejo conocido para reforzar esa posición.

El paso de Theo Hernández por la disciplina madridista dejó muchas más sombras que luces, lo que provocó que el Real Madrid decidiese venderlo al Milán el pasado verano. Uno de los fichajes que más polémica levantó, al proceder del Atlético de Madrid, no funcionó en la Casa Blanca. Florentino pagó cerca de 25 millones de euros por su traspaso y acabó saliendo por 20 ‘kilos’, una operación en la que el club blanco se guardó una opción de recompra.

La gran temporada en el fútbol italiano del francés ha levantado el interés de varios clubes grandes de Europa. La Juventus y el Manchester United le siguen de cerca y su futuro podría pasar por cualquiera de los dos clubes. En el Real Madrid se está valorando la posibilidad de hacer una inversión de nuevo por un jugador que ya conoce la casa y que se ganó el cariño de la afición -más fuera que dentro del campo-. La posible marcha de Marcelo sería la clave para que la operación llegase a buen puerto y Theo regresara a la que fue su casa.

Theo ya habría hablado con el vestuario del Madrid para saber si sería bien recibido. El capitán Sergio Ramos era uno de los jugadores con los que mejor relación tenía dentro de la plantilla, y avala plenamente la vuelta del francés. El lateral contó con bastante protagonismo con Zidane en el banquillo, y con su compatriota de nuevo en el banquillo del Bernabéu su vuelta está más cerca que nunca. El deseo del jugador ya lo conocen en Chamartín, y no es otro que volver a vestir de blanco la temporada que viene.