Se siente engañado por Ronald Koeman: pelea en el Barça

Así se lo ha hecho saber en una discusión

Se siente engañado por Ronald Koeman: pelea en el Barça

Carles Aleñá salió del Barça el pasado mes de enero, y puso rumbo al Real Betis Balompié a préstamo. Allí, fue importante y titular habitual, si bien no rindió a un nivel excelso, ni tampoco hizo demasiados méritos para regresar. Tampoco le ayudó la delicada crisis deportiva de los sevillanos, que cambiaron de entrenador a unas cuantas jornadas del final de La Liga Santander. Pero, contra todo pronóstico, a sus 22 años, este verano regresó.

Ronald Koeman le aseguró que contaba con él y entraba en sus planes, si bien tendría un rol secundario. Aún y así, le prometió que tendría minutos, viendo la edad de Sergio Busquets, 32 años, y el mal momento de forma en el que ha llegado Miralem Pjanic. Además, la nueva normativa permite hacer cinco cambios por choque, lo que significa que tiene más posibilidades de jugar. El de Mataró se quedó, y le asignaron el dorsal ‘6’, como muestra de confianza.

Aleñá

Porque es el que han vestido leyendas como Xavi Hernández o Dani Alves. Y ya avisó de que se quedaba solo si le garantizaban cierta regularidad, pues, de lo contrario, tampoco descartaba una nueva cesión. Pero la realidad a día de hoy es la que es, y todavía no se ha estrenado en partido oficial, y no ha jugado ni un solo minuto. Ni siquiera, ante el modesto Ferencvaros en la Champions League, a pesar de tener ya el marcador encarrilado.

El internacional español sub 21 está muy enfadado y descontento, y así lo ha hecho saber. Espera que esta situación cambie de manera radical en las próximas semanas, y le den más oportunidades de las que está teniendo. Y observa con peligro como Riqui Puig, un competidor directo que le aseguraron que se marcharía, puede también pasarle por delante en las preferencias del técnico holandés. El desenlace de la historia no pinta nada bonito.

Aleñá tiene un mosqueo terrible, y que solo se puede solucionar de una manera: con minutos. En el Barça deberán de lidiar con un jugador que amenaza con convertirse en una ‘patata caliente’.

Y lo peor todavía está por llegar.