¡Sentenciado! La culpa fue de Dembelé (y Koeman no lo quería)
Un movimiento que nunca se cumplirá.
El paso del tiempo suele revelar verdades que, en su momento, parecían misterios indescifrables. Esta vez, las dudas habrían quedado saldadas en tiempo récord, dejando como protagonistas a Ousmane Dembélé y Ronald Koeman. Y es que las barreras para la llegada de un crack anhelado por el barcelonismo han sido más de las que se pensaban.
Hasta hace meses, en el entorno azulgrana parecía que la solución a todos los problemas pasaba por el regreso de Neymar. Un sector pensó que el brasileño no solo podía ayudar a recuperar la esencia futbolística perdida, sino que sería un aliado importante para cerrar la renovación de Lionel Messi por la gran amistad que los une. Sin embargo, el extremo de Mogi das Cruzes no terminó llegando y las razones que se dieron desde la dirigencia catalana se relacionaron única y exclusivamente con las dificultades financieras. Algo que solo fue parte de la verdad.
La otra fracción de realidad que se habría filtrado, indica que el descarte de Neymar del Barça tuvo que ver con Ousmane Dembélé. A tal efecto, la dirección deportiva fue una de las limitantes, ya que indicó desde sus informes que Dembélé contaba con un futuro mucho mayor al de Ney, además, se defendió que al brasileño le quedaban muchos menos años al máximo nivel por estar cerca de los 30 años de edad.
Pero esto no fue todo, ya que Koeman tampoco estaba muy convencido de ir a por el brasileño, debido a que podía complicarle el manejo del vestuario en un momento donde la tensión dentro del club catalán era muy elevada. Todo esto se unió a los problemas económicos para que la incorporación de Neymar fuera descartada por completo.
Dembelé y Koeman pasan por su mejor momento
La decisión que se tomó en su momento hoy es aprobada por el fantástico rendimiento que está exhibiendo Dembélé, además del manejo de grupo que finalmente ha encontrado Koeman cuando se viene la eliminatoria trascendental contra el PSG. Veremos si el Barcelona logra materializar una sobresaliente armonía de grupo con algún título importante al final de la accidentada temporada 2020-21. ¿Terminará el equipo culé extrañando el desequilibrio de Neymar?