Sergio Ramos e Isco alucinan: la traición más bestia en el Real Madrid

Marco Asensio anda muy preocupado. Porque desde que se rompió los ligamentos cruzados de la rodilla, en un amistoso de pretemporada ante el Arsenal, muy poca gente del Real Madrid se ha interesado por él. Por no decir nadie. Un varapalo aún más gordo para el balear, que tenía muchas esperanzas puestas en este curso, después de uno, el pasado, para olvidar.

Había rechazado ir a la selección española sub 21 para centrarse en su puesta a punto y llegar al 100% y convencer, de esta manera, a Zinedine Zidane. Y lo estaba logrando, ya que físicamente estaba perfecto y a sus 23 años está en la edad perfecta para dejar atrás el cartel de promesa, en el que muchos se quedan, y convertirse en realidad. Y todo apuntaba a que iba a ser titular.

Su sueño también era disputar la Eurocopa, donde debía de acumular un gran número de minutos para ser convocado. Y no se conformaba con viajar para hacer grupo: quería ser importante. Pero todos sus planes se han ido al garete y aún le quedan muchos meses por delante de trabajo. Y el ex de Mallorca o Espanyol ve como absolutamente nadie se dirige a él. 

Tan solo los médicos. Y, para colmo, no para de leer como Florentino Pérez está tratando de incorporar a un nuevo atacante para la banda derecha, como Mohamed Salah, Sadio Mané, Jadon Sancho, Pierre-Emerick Aubameyang o Kylian Mbappé. Asensio, lógicamente, está temeroso, pues, en caso de que llegue alguno, sus minutos se verían aún más reducidos.

Pero es que el escándalo es mayor. No solo no es que por la cabeza del presidente el ‘20’ vaya a ser secundario, es que no descarta hasta traspasarle. No tendrán paciencia con él y, si llega una buena oferta, la aceptarán sin problemas.

Un gesto muy feo hacia Marco.