¡Tarjeta roja! Ni como árbitro ni como entrenador
El mexicano no duró ni 3 días como director técnico en su nuevo equipo
Hemos visto muchas cosas raras en el mundo del fútbol durante toda su historia. Jugadores que se cambian al eterno rival, entrenadores que dimiten antes de comenzar la temporada, entrenadores que son cesados y a los dos meses el equipo lo vuelve a contratar…
Este último caso lo vivimos el año pasado en España. El Villarreal cesaba a Calleja en Noviembre por los malos resultados cosechados. Durante los primeros meses de competición el equipo no funcionó bien y el Villarreal estaba ocupando los puestos de descenso. El equipo jugaba bien pero no lo suficiente pues los resultados no llegaban. El equipo cada vez parecía más nervioso y no parecía que la dinámica iba a cambiar.
Calleja fue cesado y en su lugar llegó Luis García Plaza. Pero tampoco el equipo mejoro. Lo contrario. Cada vez quedaba menos tiempo y el equipo se acercaba a la segunda divisón. Un drama para un equipo que estaba hecho para luchar por entrar en Europa. Luis García Plaza fue cesado y para sorpresa de todos llamaron a Calleja. Y esta vez las cosas salieron bien.
EL equipo encontró el equilibrio y acabó consiguiendo la salvación una jornada antes de acabar la primera división. Este año no han empezado muy bien las cosas para los de Calleja, que siguió en el cargo, pero seguro que los dirigentes se acuerdan de la decisión tomada el año pasado si piensan en echarle de nuevo.
Pero lo vivido esta semana creo que es algo inaudito en el fútbol. El ex arbítro internacional Chiqui Marco Rodríguez entrenaría en España. En la segunda división B. Más concretamente en el histórico club del Salamanca CF. Había mucha expectación sobre su llegada. Incluso llegó a decir que no renunciaba a meter el equipo en Champions en un futuro y ser seleccionador. La calentada.
Tres días despúes, ayer por la tarde, Chiqui Rodríguez fue cesado como entrenador del equipo. No ha dado aún explicaciones pero parece que se debe a que el mexicano quería imponer su equipo de trabajo y echar al resto de preparadores. No gustó a la directiva las formas del mexicano y ya está fuera. La tarjeta roja más rápida en la historia se la ha llevado él.