¡Se va en enero! Primera baja del Barça, ¡nadie lo esperaba!

¡Se va en enero! Primera baja del Barça, ¡nadie lo esperaba!

No jugó contra el Real Madrid y la paciencia con él se ha acabado

El Clásico va a traer cola en el Fútbol Club Barcelona. Las malas sensaciones que dejó el equipo han abierto muchas heridas dentro del vestuario. El conjunto blaugrana demostró una vez más que si hay un jugador que no tenga sustituto en la plantilla, a parte de Messi, es Sergio Busquets. El catalán fue baja y el equipo lo notó. Nadie pudo cubrir su ausencia con un mínimo de dignidad.

El que podría haberlo hecho es Arthur. Pero el jugador brasileño sigue lesionado. En la que debía ser su temporada de confirmación no está teniendo suerte. O más bien no la está buscando. En el club están cansados de sus actos de indisciplina. Le pillaron practicando snowboard cuando debía estar reposando. Además, una actividad que el club tiene prohibida a los jugadores por el riesgo que tiene.

Arthur debe recuperarse y ayudar a Valverde a arreglar el rompe cabezas que tiene en el medio del campo. Ahora Rakitic es titular cuando hace dos semanas parecía que estaba fuera. Arturo Vidal casi no cuenta y los jugadores empiezan a cansarse de las decisiones del entrenador vasco.

Quien ya tiene puesto el cartel de “se va” desde hace mucho tiempo es Carles Aleña. Valverde le ha vuelto a dar minutos este mes y ha generado dudas sobre su marcha, pero el jugador no tiene ninguna. Quiere abandonar el Barcelona para jugar con más regularidad.

El Betis le quiere y va a hacer el esfuerzo. Un jugón más para el centro del campo le viene bien. Aleña tiene mucho que demostrar y lo quiere hacer desde enero. No quiere que su cesión, en principio sin opción de compra, se retrase más. Tiene 6 meses para demostrar a Valverde y el cuerpo técnico que está preparado para jugar de titular en el Barcelona. Quizás la baja de Busquets hubiera sido una buena oportunidad para darle minutos, pero de momento no está en los planes de Valverde.  

Es hora de salir y demostrar. Es la hora de Aleña. Nadie esperaba que fuera tan precipitado. Pero, quizás injustamente, la paciencia con él se ha acabado.