La venganza más bestia de Keylor Navas a Zidane (y Florentino Pérez)

La venganza más bestia de Keylor Navas a Zidane (y Florentino Pérez)

El costarricense saldrá del Real Madrid

Keylor Navas ya sabe que tiene que encontrar equipo. Al sudamericano le comunicaron la semana pasada que no tiene hueco en los planes de Zinedine Zidane, al que le han ordenado desde arriba que coloque a Thibaut Courtois como titular, y ya se despidió del Real Madrid el fin de semana, mientras que la afición le aclamaba.

El costarricense es un ídolo entre la grada y es muy querido y respetado por sus compañeros. En los cinco años que ha estado en el club, su rendimiento ha sido óptimo y nunca ha alzado la voz o ha tenido algún episodio violento. Como muestra de agradecimiento, desde el club negociarán su salida a un precio asequible, de unos diez millones de euros.

El ‘tico’ se marcha contento y agradecido por todos los títulos logrados y por el cariño que le han mostrado en este tiempo. Pero se va muy disgustado con la directiva, ya que han preferido apostar por Courtois, que ha ofrecido un rendimiento mucho más bajo, solo por el elevado precio de su traspaso.

Ahora, solo queda mirar hacia adelante. Y Keylor tiene decidido seguir en España, país en el que espera firmar su último gran contrato profesional antes de retirarse, puesto que ya tiene 32 años.

Navas y su familia están plenamente integrados a la vida en la península, a la que llegaron en 2010, cuando firmó por el Albacete, y no tienen ninguna intención de salir. En la Liga Santander, el Valencia, el Celta y el Sevilla ya han llamado a su puerta.

En Mestalla tienen prioridad, ya que el año que viene disputarán la Champions League. Si Neto Murara sale del club ‘ché’, se lanzarían a por Keylor. Lo mismo que en Sevilla, si bien tienen dos inconvenientes: el primero, que jugarán Europa League, y el segundo, la presencia de un Vaclik que ha rendido a las mil maravillas y al que el portero del Real ve como seria competencia, algo que no quiere.

El Celta sería la opción a la desesperada. En Vigo sería indiscutible, pero lucharía por unos objetivos menos ambiciosos y tendría que aceptar una rebaja de sueldo considerable. 

Veremos.