Zidane le roba una pieza a Mauricio Pochettino (y no es Eriksen)

El Real Madrid está muy interesado en hacerse con una de las nuevas joyas del futbol británico, Troy Parrott. El delantero del Tottenham, de 17 años, es una de las grandes esperanzas de Irlanda, su lugar de nacimiento, y que hace unos meses ya perdió a otra de sus estrellas, Declan Rice, que decidió nacionalizarse con Inglaterra para jugar en la selección de Gareth Southgate.

Nacido en el 2002, este delantero o extremo destaca por su velocidad, su inteligencia y su capacidad anotadora. Ojeadores de clubes de todo el Mundo, como RB Leipzig, Schalke 04, Bayer Leverkusen, Wolfsburgo, Mónaco, Paris Saint-Germain, Roma, Napoli o Inter de Milán se han reunido en Londres para seguir de cerca sus evoluciones y valorar detenidamente su potencial.

Y se espera que en la UEFA Youth League, la Champions juvenil, tenga un papel destacado, que le permita situarse en el escaparate. De esta manera, atraerá a muchos más equipos y demostrará que, ante rivales de categoría, también puede ser determinante. Florentino Pérez, en su intenso seguimiento de nuevas promesas, ya ha tendido sus redes y planea lanzarse a por él.

Quieren que tenga un impacto similar al que tuvo, y tiene, Jadon Sancho en su día en el Borussia Dortmund, y que comience ayudando al Castilla de Raúl González o al Juvenil A. Y el plan sería que, en un plazo de dos a tres años, diera el salto al primer equipo, y compartiera ataque con Vinicius Junior, Rodrygo Goes, Luka Jovic, Takefusa Kubo o Brahim Díaz.

Una fuga que el cuadro ‘spur’ quiere evitar a toda costa. Es más, Mauricio Pocchettino le ha prometido que este curso, o el que viene, debutará con el primer equipo y, a largo plazo, está destinado que sea el sustituto de un Harry Kane que no tiene recambio en la plantilla, tras la marcha de Fernando Llorente, que ha firmado libre por el Napoli de Carlo Ancelotti.

Eriksen no es el único objetivo.