Zinedine Zidane no le supo valorar, y ahora se ha ofrecido al Barça
No tuvo ninguna oportunidad en el Madrid
Zinedine Zidane no dio la oportunidad a Raúl de Tomás de demostrar su valía en el Real Madrid, por más que se la merecía. El verano pasado, después de su gran hacer en el Rayo Vallecano, primero en La Liga SmartBank y luego, en La Liga Santander, muchos se la pedían. Obviamente, no para ser el titular por delante de Karim Benzema, si no para ser su principal relevo, viendo los problemas de lesiones de Mariano Díaz, que no entraba en sus planes.
No obstante, ni por esas el galo decidió brindarle esa ocasión. En su lugar, apostó por Luka Jovic, que costó un dineral desde el Eintracht Frankfurt, y que ha ofrecido un rendimiento paupérrimo. El hispano-dominicano, por su parte, aceptó la oferta del Benfica, que pagó poco más de 20 millones de euros. Pero allí solo duró seis meses, ya que nunca se acabó de adaptar a la Liga NOS, y decidió regresar a España en el mes de enero.
Concretamente, a las filas del Real Club Deportivo Espanyol, que hizo una apuesta tremenda. Con él, esperaban lograr los ansiados goles que les permitiera evitar el descenso, pero tampoco hace milagros. Y, si bien rindió realmente bien, no pudieron evitar caer al infierno de Segunda División, en el que actualmente se encuentran. Tras eso, muchos daban por hecho que el delantero de 26 años iba a hacer las maletas, para seguir en la élite.
Pero se quedó en el conjunto ‘periquito’, para ayudar a devolverles a la cima, ya que tampoco recibió ninguna oferta atractiva. Eso si, este próximo mercado invernal tratará de marcharse, y tiene varias opciones encima de la mesa. Y, entre ellas, se habría ofrecido al Barça, el eterno rival del Madrid, a pesar de que se ha criado en La Fábrica. Esa sería su particular manera de vengarse contra ‘Zizou’, ya que lo tiene todo planeado.
Sin embargo, parece muy complicado pensar que en el Camp Nou vayan a lanzarse a por su firma. No es una opción que contemplen, y, además, en el RCDE Stadium tampoco negociarán con su eterno rival.
De ilusiones no se vive.