Pochettino toma su 1ª gran decisión y sorprende a Neymar JR: vía libre

Ya venimos comentando que la dinámica que atraviesan tanto el Real Madrid como el FC Barcelona esta temporada no invita al optimismo, pero desde luego que la del PSG tampoco lo hace. El conjunto parisino, a pesar de tener todas las estrellas a su disposición, está atravesando serias dificultades en la Ligue 1 y Pochettino ya ha hecho saltar todas las alarmas: ha cosechado tres victorias, un empate y una derrota en sus primeros cinco choques al frente de los franceses. 

Desde luego que no es el mejor registro para comenzar una nueva andadura en un club tan exigente, aunque haya ganado recientemente la Supercopa de Francia. Sin embargo, con los octavos de final de la Champions League a la vuelta de la esquina, Pochettino no quiere dejar desguardado ningún apartado del juego y, dado que el mercado de fichajes invernal ya ha echado el cierre, el PSG tendrá que afrontar ese duelo vital con lo que tiene actualmente en la plantilla.

Son muchos los jugadores de la actual plantilla de los franceses que llevan tiempo dejando mucho que desear con su rendimiento, especialmente en la parcela defensiva y creativa del terreno de juego. Jugadores como Thilo Kehrer, Julian Draxler o Idrissa Gueye han sonado en las últimas semanas para abandonar el Parque de los Príncipes de forma inmediata, pero el precio exigido por el jeque catarí ha privado a estos efectivos de abandonar 'la ciudad del amor'.

Aunque Mauricio Pochettino no logre los objetivos europeos esta temporada, salvo sorpresa mayúscula, seguirá al frente del PSG la próxima temporada, una campaña en la que se prevén muchos cambios en el seno parisino. Kylian Mbappé será uno de los grandes agitadores del mercado ya que, con Florentino Pérez tirándole la caña, al conjunto galo no le resultará nada sencillo retener al jugador.

Pero también deberá poner la situación de otros jugadores en tela de juicio, ya que los nombres previamente mencionados no han terminado de convencer al argentino y podrían ser una buena moneda de cambio para abaratar la llegada de Leo Messi, siempre y cuando Nasser Al-Khelaifi acceda a cumplir con las exigencias salariales del crack del FC Barcelona e, incluso, con las de Sergio Ramos, quien también está entre los intereses del club: Neymar sonríe, está feliz.