La última oportunidad. Si no pasa de ronda en Champions está sentenciado

La última oportunidad. Si no pasa de ronda en Champions está sentenciado

La afición se ha cansado de sus rotaciones y de su tranquilidad en momentos de crisis. ¡Valverde suena como sustituto!

Los octavos de la Champions van a dirimir muchas cosas. No solo en cuanto a premios individuales de los jugadores, ¿será Messi Balón de Oro si cae en octavos frente al Nápoles? Si no también muchos entrenadores se juegan el puesto y su futuro. Zidane parece a salvo, de moemento. Setién acaba de llegar, pero tampoco puede jugar con fuego. El que más complicado lo tiene es Tuchel. Si cae contra el Borussia de Dortmund puede que no acabe la temporada.

Así de crudo y así de duro puede ser el fútbol con el alemán. Ayer al anunciar su nombre en megafonía hubo pitos. La afición se ha cansado de él. Su gestión del vestuario está siendo bastante mala y la gente se ha hartado ya. Mbappé es un niño malcriado por él y no se aguantan. El internacional francés parece que quiere forzar su salida al Real Madrid. Cada vez está más claro.

La directiva no le perdona a Tuchel eso ni que el vestuario se haya descontrolado. Da la sensación de que los jugadores mandan más que el propio técnico. Cavani, Keylor Navas, Icardi, Di María… se han hecho fuertes y han tomado el control del vestuario.

Ya han salido varios nombres de posibles sustitutos. Suena con fuerza Ernesto Valverde. A la directiva le gusta el carácter conciliador del técnico catalán. Sabe generar buen ambiente en el vestuario y controla a sus estrellas. Hoy algo más necesario que nunca en el equipo parisino.

Tuchel llegó la temporada pasada y la victoria en la liga y, seguramente, la victoria que conseguirá este año, puede ser insuficiente para su continuidad. Sin Champions no hay paraíso. Khelaïfi sabe que al proyecto del PSG le falta la guinda y eso sería una final de Champions. Se han estancado y no pueden permitirse otro fracaso.

Si ocurre rodarán cabezas. No puede ser de otra forma para un equipo que se ha dejado un pastizal para dominar Europa estos años y no ha conseguido ni hacer cosquillas a los grandes.