Bellingham es quien se ha quejado de que el Real Madrid juega con 10 el Mundial de Clubes
El centrocampista inglés cree que el Madrid juega con uno menos señalando a un jugador
Jude Bellingham es una de las piezas más importantes del Real Madrid en el engranaje de Xabi Alonso. El tolosarra tiene claro que el centrocampista tendrá un rol ideal a su juego para que pueda volver el gran jugador que fue en su primera temporada con el conjunto blanco. Aun así, el futbolista ya se ha quejado al técnico de que el equipo está jugando con 10 el Mundial de Clubes.
El inglés ha señalado directamente a uno de los futbolistas que, en el primer partido, también fue castigado por el entrenador. Se trata de Raúl Asencio, uno de los defensas del Madrid que no ha vivido un buen debut en la nueva competición de la FIFA. El central cometió un penalti absurdo en la primera parte que significó el gol del Al-Hilal y fue sustituido al descanso por Alonso.
Bellingham cree que el Madrid juega con 10 cuando Asencio está en el campo
La realidad es que gran parte del vestuario cree que el canterano no tiene el nivel suficiente para jugar en el Madrid y que su presencia en el terreno de juego hace perjudicar los intereses del equipo, especialmente cuando se le ven las carencias que tiene a la hora de defender. Algunos jugadores piensan que aún está verde para poder ser titular y una pieza importante en la retaguardia.
Si Asencio ha jugado mucho ha sido por los graves problemas de lesiones que ha sufrido el Madrid en defensa a lo largo del curso, lo que provocó que el canario jugara con regularidad, aunque ni estuviese listo para hacerlo al más alto nivel, teniendo en cuenta que vino directamente desde el filial, y tampoco ha demostrado que pueda ser uno de los próximos líderes atrás.
Sus compañeros han criticado algunas de sus acciones
Aunque el central ha tenido algunos encuentros buenos, han destacado más los malos, donde se le han visto los problemas defensivos y la falta de concentración que tiene en algunos momentos, como el penalti tonto que cometió en el primer duelo del Mundial de Clubes, una pena máxima que criticaron tanto sus compañeros en el vestuario, uno de ellos Thibaut Courtois, así como el propio entrenador.