De intocable con Ancelotti a ser un problema porque está fuera de forma, su compromiso no es aceptable
Un jugador que era indiscutible la temporada pasada podría tener los días contados en el Madrid
La humillación sufrida por parte del PSG en las semifinales del Mundial de Clubes podría provocar cambios drásticos en el Real Madrid. Algunos jugadores han quedado totalmente señalados por su pésimo rendimiento en el terreno de juego, por lo que tanto Xabi Alonso como la dirección deportiva no descartan que a estos futbolistas se les abra la puerta de salida en el mercado.
Uno de ellos es Antonio Rüdiger, uno de los centrales que quedó en el punto de mira por el error clamoroso que realizó, perdiendo el balón y regalando el segundo gol a los franceses. Por eso, un jugador que era intocable con el anterior entrenador, Carlo Ancelotti, ha pasado a ser un problema porque está fuera de forma y su compromiso no es aceptable desde ya hace tiempo.
Antonio Rüdiger ha pasado a ser un problema en el Madrid
Las últimas lesiones han afectado al alemán, que volvió hace poco de los problemas físicos que le impidieron acabar bien la temporada pasada. Aun así, su nivel sobre el campo ha sido bastante malo, a pesar de que, presuntamente, sigue siendo uno de los líderes de la retaguardia. Además, su actitud tóxica hace que tenga a algunos pesos pesados del vestuario en contra.
El Madrid ya no descarta una posible salida de Rüdiger si se cumplen algunas condiciones. El contrato del defensa acaba el año que viene, en 2026, por lo que se le podría dar la carta de libertad si llegase un equipo dispuesto a hacerse con sus servicios y él pide salir. Arabia Saudí lleva llamando a su puerta desde hace tiempo, por lo que no se descartaría que ese fuera su destino.
El alemán podría tener la puerta de salida abierta
En el caso de que el alemán se marchara, el conjunto blanco se lanzaría al mercado a por un central. Dean Huijsen tiene todos los números para convertirse en la opción número uno en defensa, pero la elección de su pareja está creando dudas al staff técnico, teniendo en cuenta que Raúl Asencio no convence y que Éder Militão acaba de volver de la segunda grave lesión de rodilla que sufrió el curso pasado.