Arde Mercedes con la llegada de Russell y Hamilton flipa: sin favorito

Arde Mercedes con la llegada de Russell y Hamilton flipa: sin favorito

La escudería alemana se lo ha dejado muy claro al heptacampeón del mundo

Se podía prever que el fichaje de George Russell por Mercedes iba a dar un vuelco en la escudería que alteraría el comportamiento de todo el equipo. Cierto es que Valtteri Bottas apenas ha sido una molestia competitiva para Lewis Hamilton durante la trayectoria de ambos en el equipo (los últimos cinco años), pero la llegada del británico ha provocado un giro radical que ha sorprendido al heptacampeón del mundo de una forma atronadora: no habrá favorito en el equipo en 2022.

Por rendimiento, Hamilton ha sido el líder incuestionable de una escudería que ha acaparado la hegemonía sobre el asfalto sin apenas competencia, salvo este año con Red Bull. De momento, la relación entre ambos pilotos británicos no ha comenzado del todo bien ya que el propio campeón ha afirmado hace unas horas que aún no ha felicitado en persona al que será su nuevo compañero a partir de esta campaña y que solamente le ha enviado un mensaje.

Bottas

Para más inri, las intenciones del joven piloto de Williams son muy claras y en ningún momento ha dejado entrever la aceptación de un rol secundario de buenas a primeras ya que considera que puede hacer sombra a Hamilton conforme ocupe su nuevo monoplaza, como ya ocurrió con Nico Rosberg en 2016.

Toto Wolff tiene mucho que ver en el optimismo mostrado por George ya que el propio piloto ha afirmado que desde el primer momento su importancia en el equipo estará al mismo nivel que la de su compañero, según ha recogido Car&Driver: “Me han dicho claramente que Lewis y yo tendremos las mismas oportunidades y que estaremos al mismo nivel en 2022. Estoy seguro de que ambos correremos con respeto y sin crear problemas para el equipo. En el pasado, Mercedes ha vivido momentos de tensión entre sus pilotos y yo comparto la visión que tienen de equipo”.

Hamilton

Eso sí, aunque el rol del británico de 23 años no vaya ser secundario, Russell solamente acumula tres campañas en la Fórmula 1 y su salto a un monoplaza mucho más competitivo podría suponerle más problemas de los aparentes, más aún si tiene que lidiar con la presión de compartir asiento contra un siete -y a lo mejor ocho- veces campeón del mundo.