Fernando Alonso ya da miedo con Renault
El viaje al pasado del asturiano desata pasiones en la Fórmula 1
Fernando Alonso ya está de vuelta. Desde hace más de 5 meses sabemos que el piloto asturiano será piloto de la escudería Renault para las dos próximas temporadas en la Fórmula 1, pero no le habíamos visto junto al resto de pilotos en un circuito. Ayer por fin le vimos pilotar mientras el resto de compañeros le admiraban desde sus asientos. Alonso rodó con el coche con el que fue campeón en 2005, el R25.
Viendo el coche ahora en comparación con el resto, parece que estamos hablando de otro deporte. El mismo Alonso comentaba entre risas que el R25 parece mucho más pequeño que los coches que hay en la actualidad, pero no ha perdido su velocidad y así lo demostró Alonso en unos entrenamientos libres donde voló sobre la pista de Abu Dhabi.
Alonso sabe que su escudería no ha tenido un año sencillo. El coronavirus dejó a todos tocados y la evolución que esperaba Renault esta temporada no se ha dado. La marca francesa creía que para el año que viene podría luchar por la parte alta de la clasificación, pero de momento deben conformarse con intentar ser el mejor de los peores. Es decir, colocarse los líderes de esas escuderías que van detrás de las marcas más potentes como son Mercedes, Red Bull, Ferrari y McLaren.
Si alguien tiene fe en poder conseguir una evolución positiva y poder competir en la temporada de 2022 por el Mundial es ese el propio Alonso. El piloto asturiano lleva trabajando con los mecánicos de Renault desde que firmó su nuevo contrato con ellos. La evolución del coche está siendo positiva y con el cambio de reglas previsto para dentro de dos años creen que podrían estar cerca de ese vagón de cabeza. ¿Se imaginan a Alonso de nuevo campeón del mundo? El propio Fernando lo hace, y solo eso es una garantía de éxito.
Este fin de semana acaba un Mundial marcado por la pandemia y que ha dejado a Lewis Hamilton como absoluto dominador de una competición que necesitaba de alicientes como la vuelta del asturiano. La calidad siempre debe de estar sobre la pista. Así será.