Hamilton, KO definitivo: Schumacher asesta el golpe final en Mercedes
Nuevo varapalo para el inglés, y en el peor momento
Cuando las sensaciones estaban comenzando a ser esperanzadoras de cara a los seis meses que restan de campeonato de Fórmula 1, Lewis Hamilton ha vuelto a recibir un golpe de autoestima demoledor en sus aspiraciones, aunque esta vez no ha sido ningún piloto de la parrilla el causante de ello. Según ha revelado Crash, Philipp Brandle, quien fuera asesor en la escudería alemana durante seis años, se ha atrevido a realizar unas declaraciones nada gratificantes para el heptacampeón del mundo, unas comparativa que aleja ese pensamiento por el que muchos le sitúan como el mejor de la historia.
En este caso, Brandle, una cara más que reconocida en el paddock, ha esclarecido cuál es para él la gran diferencia entre Hamilton y Michael Schumacher, quien priva al inglés de ser en solitario el hombre con más títulos ganados en la historia de la categoría: “Necesita tener confianza en el monoplaza en todo momento. Él no es como Schumacher y no tiene la formación técnica, aunque puede sentir el coche particularmente bien”.
Cabe mencionar que Brandle trabajó en Mercedes como asesor técnico debido a sus amplios conocimientos en aerodinámica, precisamente una etapa en la que la marca germana logró ganar todos los campeonatos posibles. Esta temporada, por el contrario, Mercedes no ha podido igualar el ritmo de Ferrari y Red Bull con Silver Arrows (también denominado W13) y ahora tanto Lewis como su compañero George Russell se tienen que conformar con ser el tercer monoplaza más rápido en la parrilla.
Con estas palabras realizadas por Brandle solo hay una lectura posible: que Hamilton depende mucho del coche para poder obtener mejores resultados y que Schumacher demostró ser mucho más hábil sobre el volante, independientemente de que su arma de trabajo fuera la más poderosa sobre el asfalto.
Este fin de semana no hay carrera, pero Hamilton ha encajado con estas palabras un varapalo inesperado que podría alejarle, de forma indirecta, de su idea de remontar puestos en la clasificación general y, por ende, de ser el piloto más laureado de la historia en cuanto a títulos conseguidos: por el momento, ambos tienen siete en su palmarés.