Jorge Lorenzo y Valentino Rossi sacuden a Marc Márquez

Jorge Lorenzo y Valentino Rossi sacuden a Marc Márquez

'Il Dottore' se calienta, entra al trapo ¡y suelta esto del español!

No está sentando bien entre los campeones el octavo título de Marc Márquez, sexto suyo en la categoría reina. Los dos más grandes campeones en activo (además del vigente campeón), Valentino Rossi y Jorge Lorenzo, que al comienzo de temporada pasaban por ser los dos grandes obstáculos del de Cervera para llevarse el título, junto a Andrea Dovizioso, no han tenido su año y en el caso del balear no solo no ha disfrutado de la moto, su particular versión de la Honda campeona, sino que ha vivido un calvario mental que le ha pasado factura.

De hecho tras proclamarse campeón del mundo el catalán este fin de semana en el GP de Tailandia, Lorenzo salía a la palestra pública muy apesadumbrado y con un gesto duro, reflejo de una temporada que está lejos de ser lo que se esperaba de él (y él mismo esperaba se sí mismo). No en vano Lorenzo posee tres títulos de MotoGP y venía a competir en igualdad de condiciones con el campeón a su equipo.

Jorge Lorenzo

Pero no ha sido así, el de Palma de Mallorca, cinco veces campeón del mundo, marcha en la decimonovena posición, solo ha puntuado en algo más de media docena de carreras y dice tener pocas esperanzas en esta temporada. Con los rumores sobre su vuelta a Ducati aún en el aire, el pentacampeón soltó una punzante declaración a su equipo, a modo de advertencia, que va a traer cola. Y es que avisó de que Honda debería hacer el mismo esfuerzo por él que por Márquez, insinuando que no es así.

Y no es el único molesto con la victoria del 93 de Repsol Honda, porque el nueve veces triunfador de motociclismo (siete en MotoGP), Valentino Rossi declaró sentirse apesadumbrado con la posibilidad de que Marc le coja, algo que considera que va a pasar. Eso sí, Rossi no dejó que el de Cervera se fuera de rositas y aseguró que el tiro dos títulos y le robaron otro, en cara referencia aquel polémico final de temporada que supuso, precisamente, el último título mundial de Lorenzo.