Revolución total en MotoGP para 2023: toca a Marc Márquez y Viñales

MotoGP se ha visto obligada como competición a lidiar con el impacto climático al igual que el resto de los deportes de motor, presentando el combustible sintético como la próxima frontera en este ámbito, que podría aterrizar la próxima temporada en el campeonato comenzando por la categoría de Moto2. El futuro del mundial continúa rumbo a un combustible eco-sostenible, al igual que la Fórmula 1 o el mundial de Rally. En Dorna llevan mucho tiempo discutiendo sobre el tema, pese a que no se vislumbran cambios a priori para la temporada 2022. Las dos marcas que se han pronunciado al respecto son Aprillia y Honda, sumándose a la iniciativa a pesar de marcar unas condiciones muy claras respecto a no asumir costes extra por culpa de este cambio tan radical que influirá completamente en la confección de las motos.

La llegada de este campo a la categoría reina puede suponer una ventaja importante para HRC, teniendo en cuenta que tienen experiencia previa en la F1, pese a que se trata solamente de la teoría. El director técnico de Honda, Takeo Yokoyama, ha exigido que se marque con claridad la dirección a seguir en este asunto, respaldando y apoyando la llegada del combustible sintético, aunque asegura que necesitarán un tiempo para adaptar sus motores a esta nueva reglamentación que podría llegar en 2023. Una supuesta ventaja con la que contaría Marc Márquez que contaría a priori nuevamente con una de las mejores motos de la parrilla.

Desde Aprillia se han mostrado más cautos respecto a esta nueva posible medida para MotoGP, asegurando que se trata de algo inevitable a largo plazo a pesar de que no debe suponer un problema en el ámbito económico para las marcas. “Podríamos usar combustible ecológico en nuestro motor de combustión interna, sin tener que usar extraños sistemas eléctricos o híbridos” ha comentado Romano Albesiano, director técnico de Aprilia. La escudería italiana buscará continuar con su evolución de la mano de Maverick Viñales, a la espera de que se anuncie dicha decisión.

Con el desarrollo de todas las motos para 2022 muy avanzado y los próximos test en Jerez a la vuelta de la esquina, parece complicado que la próxima temporada se pueda implementar esta medida con el combustible, al menos en la categoría reina. Desde Dorna siguen meditando el mejor modo de pasarse a la energía eco-sostenible, con la posibilidad de cambiar su normativa para 2023 en lo que supondría un nuevo comienzo para MotoGP, con Honda y Aprillia respaldando la decisión desde el primer momento.