Revelan los dos propóstios del vestuario del Barça para el Clásico

La plantilla azulgrana tiene muy claro que en el Barça-Madrid del 22 de marzo hay mucho más que tres puntos en juego y el título de Liga

Revelan los dos propóstios del vestuario del Barça para el Clásico

El Barça lo tiene claro: no habrá una oportunidad mejor. El equipo de Luis Enrique pone en juego en el próximo clásico dos consecuencias evidentes. Una, dar un paso de gigante en la Liga. Y, dos, y la que más gusta en el Camp Nou, darle un baile al rival y dejar al Madrid a los pies de los caballos. Hecho unos zorros. Elaborando listas negras, con buenos y malos, analizando los gestos de CR7 hasta final de temporada. A Ancelotti con el finiquito en la mano. Y a Florentino Pérez, el presidente, poniendo en marcha otra remodelación de muchos duros para sacar a la entidad/equipo del socavón.

 

Esto es, en esencia, lo ‘otro’ que hay en disputa en el clásico del 22. Una realidad que no ha pasado por alto en el club/vestuario y que tiene al equipo enchufado com nunca. "Saben lo que hay en juego. Ganar al Madrid es ganar se mire como se mire", apunta una fuente del club a este medio, que abunda: "En los despachos existe el convencimiento de que una victoria ante el Real dejaría la Liga vista para sentencia y a Bartomeu con más opciones que nunca de salir elegido presidente en las elecciones de julio. 'Barto' juega dos partidos: el del campo y el de las urnas. Cuanto peor le va al Madrid, mejor le va a él y al Barça".

 

Y no pinta mal. Porque las sensaciones que transmite el grupo son inmejorables. El equipo ha hecho buenos los pactos de no agresión Luis Enrique/Messi y compañía y rema a una. "Se les ve bien. Han recuperado la confianza. Las ganas. Va a ser difícil acabar con esta dinámica. Van para arriba", señala una voz próxima al equipo, que añade: "Saben los que se juegan ante el Madrid. Van a ir a por todas. Están unidos".

 

Prueba de ello fue el buen clima de la barbacoa que amenizó al grupo tras el entrenamiento matinal del miércoles. Una vez finalizado la sesión, los jugadores del FC Barcelona acudieron al jardín de La Masia de la Ciutat Esportiva Joan Gamper para celebrar una barbacoa grupal, junto a los miembros del staff técnico. Una 'conjura' que pagó Sergio Busquets para celebrar su reciente renovación y que demuestra el buen rollo y el buen ambiente que reina en el grupo y que llega además en una fase clave de la temporada, justo cuando se empiezan a decidir todos los títulos. "Aquí se hacen comidas y no cenas. Y vienen todos, hasta los técnicos", atizaba en alusión al Madrid uno de los miembros de la ejecutiva azulgrana. Optimismo a raudales.