Estas pueden ser las primeras consecuencias de la debacle del Barcelona

La derrota del Barcelona por 4-0 ante el Athletic Club puede tener consecuencias más pronto que tarde en el conjunto de Luis Enrique. Pese a su actitud calmada en rueda de prensa, el técnico asturiano está muy enfadado con sus jugadores y este mismo lunes para la vuelte se pueden ver ya los primeros cambios.

El primero y más claro está en la portería. Ter Stegen, que se incorporó antes de tiempo a la desciplina azulgrana, no ha tenido una buena pretemporada y ha dejado muchas dudas. Además, ha encajado 8 goles en los dos partidos oficiales que ha disputado esta nueva temporada. El alemán realizó una muy buena Champions League la campaña pasada, pero todavía es muy joven y Luis Enrique confía mucho en Claudio Bravo, que hizo un muy buen campeonato de Liga. El chileno podría jugar la vuelta de la Supercopa.

Los centrales que jugaron ante el Athletic también se verán afectados. Luis Enrique confió en Bartra y Vermaelen para un encuentro tan importante, pero ambos le decepcionaron. El central catalán, al que ya han dado muchas oportunidades, sigue sin transmitir seguridad cada vez que juega y cometiendo errores claros. El belga por su parte, todavía tiene que recuperar ritmo de competición y trabajar en la salida de balón, donde se le vio sufrir ante el Athletic. Para la vuelta, Piqué-Mascherano formarán la zaga. De hecho, la pareja Bartra-Vermaelen quizás no la volvemos a ver hasta dentro de mucho tiempo.

El nivel de Adriano también dejó mucho que desear. Luis Enrique dejó en Barcelona a Mathieu por el mal partido que hizo ante el Sevilla, pero el brasileño no mejoró la actuación del ex del Valencia. Si no está Jordi Alba, el Barça sufre en el lateral izquierdo. Lo que está claro es que Adriano no está para jugar al máximo nivel, y quizás pueda ser uno de los jugadores en salir del club antes de que se cierre el mercado.

Luis Enrique confía mucho en Mascherano, y no es para menos. El 'jefecito' ha respondido siempre jugando al máximo nivel, pero esta claro que el Barça necesita a Sergio Busquets como mediocentro en partidos importantes para desplegar todo su juego.

Para acabar, Sergi Roberto tiene la confianza del técnico pero sigue sin gustar a la afición culé. Ayer perdió muchísmos balones en el centro del campo y jamás hace nada que se salga de lo 'correcto'. Se pide algo más para llevar la camiseta del Barcelona.