Un Barça en el alambre. Sus grandes pecados durante la pretemporada

Las razones de que el Barcelona perdiese la Supercopa van más allá de la expulsión de Piqué en la segunda parte. Nadie discute que la roja condicionó, pero las causas de que el sextete no se hiciese posible tienen cuestiones más de fondo.

Sin restar mérito al excelente planteamiento del técnico Valverde que asfixió el juego del Barcelona y de la efectividad de su delantero Aduriz, el equipo de Luis Enrique ha hecho evidente una serie de preocupantes carencias.

El coladero de la defensa

Los ocho goles encajados en dos partidos representan una señal preocupante. En la vuelta, la estadística registra que recibió uno y con Piqué ya expulsado. Sí, pero en el Athletic ya tuvo antes claras ocasiones para marcar. Errores en la zaga que propiciaron estas opciones.

El Barcelona ha llegado a encajar 3 goles en 25 minutos ante el Sevilla. 4 goles en seis remates como en Bilbao. Y con defensas diferentes.

Falta de puntería

Tanto en la ida y en la vuelta. Un único gol de Messi en los dos partidos. Suárez le puso más ganas que acierto y se echó mucho de menos a Neymar.

Un problema que se arrastra durante toda la temporada. Ante el Sevilla, dos goles fueron de magistral falta lanzada de Messi, pero esta falta de pólvora ya ha sido una constante. En el amistoso contra el Manchester United. El Barça chutó más que el United y más entre los tres palos, pero perdió por 3-1.

Sin recambios

No hubo reacción desde el banquillo. Encallado el partido, la respuesta de los cambios no ha sido satisfactoria. Sandro y Munir no han aportado aire fresco y la ausencia de Neymar por paperas se ha notado especialmente. Pedro estuvo acertado en su aparición milagrosa contra el Sevilla, pero como titular ha perdido en efectividad.

Cansancio

El equipo no está en su momento físicamente. Ha quedado demostrado en el campo durante una pretemporada muy exigente con las dos supercopas en las que sus rivales le han exigido mucho, incluso demasiado a estas alturas de la temporada. Parte fundamental de la plantilla no se incorporó hasta agosto por la Copa América y ha dificultado la correcta preparación.

Algunos nombres propios: Messi, Vermaelen…

El crack argentino aún no está en un momento en que pueda desequilibrar un partido. Marcó contra el Sevilla y el Athletic, pero no ha brillado como acostumbra. Lógico también a estas alturas de la temporada, pero que deja una duda, ¿si no aparece Messi, no hay alternativas?

El central belga Vermaelen ha disputado minutos en esta pretemporada, pero Luis Enrique ha acabado por descabalgarlo, señalándole, de algún modo, por las últimas goleadas. A la defensa se le presenta un problema central con la sanción de Piqué.

Falta de autocrítica

Ante el Sevilla, los responsables del Barcelona prefirieron mirar al éxito del triunfo que reflexionar en defensa ante la reacción del equipo de Emery. Contra el Athletic, se puso un velo a los cuatro goles de San Mamés con la épica de la remontada y sí, como dijo Luis Enrique con la expulsión de Piqué se acabó el partido, pero la vuelta al resultado ya se había convertido en una misión casi imposible.