Los cracks del Barça vuelven a tener a Luis Enrique en el punto de mira
La última versión del técnico recuerda al Lucho anterior a Anoeta, el que no gusta
Leo Messi tenía cara de pocos amigos. El crack del Barça abandonó el Camp Nou con el semblante serio. El argentino lleva un calentón de aúpa desde San Mamés. Leo, junto con Mascherano, Iniesta y, especialmente, Piqué no entendieron los movimientos en el once de Luis Enrique en la ida de la Supercopa de España. En el equipo existe la sensación de que si en Bilbao hubieran jugado los 'buenos' otro gallo cantaría. El argentino se sintió solo contra el mundo en la ida de un competición que mató al equipo en la vuelta. La rectificación de Lucho en la vuelta en Barcelona no es casual.
En el equipo existe la sensación de que la renovación de Luis Enrique el pasado verano a dado más galones al técnico que ha recuperado su peor versión: la del entrenador que juega a serlo que dejó al Barça en la cuneta en la primera vuelta de la pasada Liga. Sólo el toque de Anoeta puso las pilas a Lucho que tiró del once de gala hasta el final de la temporada logrando Copa, Liga y Champions.
El vestuario, en este sentido, está algo mosca. No quieren ver ni por asomo aquella versión de Luis Enrique. Messi se sintió perdido/no arropado en San Mamés con jugadores muy 'verdes' en el once que mataron el juego azulgrana. Unas críticas internas que ya se hicieron ostensibles tras ganar sobre la campana al Sevilla en Gerorgia. El propio Mascherano fue muy crítico al término del encuentro de la Supercopa de Europa apuntando errores de principiante que colocaron al equipo contra las cuerdas.
La plantilla terminó el pasado curso con una paz entre técnico y vacas sagradas forzada por los buenos resultados y el rol descendente de Luis Enrique tras el toque de Anoeta. Si Lucho vuelve a ser Lucho, el Barça seguirá siendo el Barça. Aviso.