5 problemas tácticos para Benítez al descubierto tras el Trofeo Bernabéu

"Si el equipo estuviese en el punto que yo quiero ahora mismo, estaría preocupado. Está bien, pero tiene que mejorar mucho. Hemos hecho cosas positivas pero lo bueno es que tenemos bastante margen de mejora". Con esta frase resumía Rafa Benítez el sentir de prácticamente toda la afición tras el Trofeo Santiago Bernabéu ante el Galatasaray este martes. Un duelo flojo, en el que el equipo dejó sensaciones agridulces frente a su gente en la noche de su estreno, previa al inicio de la Liga.

Está claro que este Real Madrid no está hecho aún. Y no lo está porque Benítez ha llegado para cambiar por completo la forma de entender el juego de unos futbolistas acostumbrados a cosas muy diferentes en los dos últimos años con Carlo Ancelotti. Ni mejores, ni peores... simplemente distintas. Benítez practicará otro fútbol. Quiere un equipo más disciplinado, más táctico pero a la vez con más soluciones y variantes, que no juegue sólo de una manera. Pocas cosas se han visto de momento, aunque se atisban las intenciones. Analizando lo visto ante los turcos, hay todavía puntos por pulir. Éstos son algunos:

- Falta de gol. Probablemente es lo más comentado. Resulta muy extraño para todo el mundo que un equipo con el potencial en ataque del Real Madrid, con Cristiano Ronaldo sobre el césped, no sea capaz de golear. El entrenador insiste en que, con los mimbres que tiene el plantel arriba, los goles llegarán. El problema en pretemporada se ha basado, sobre todo, en tres cosas: El momento puntual de los delanteros, que no es especialmente bueno (Cristiano falló ocasiones inusuales ante el Gatalasaray); Las lesiones, que han dejado a Benzema y al propio Cristiano Ronaldo sin participar en bastantes partidos este verano. Y por último los cambios de sistema, que están haciendo que todo el equipo ande todavía interiorizando movimientos y cambios de posiciones para defender y presionar de forma alta. Se ha 'descuidado' un poco el ataque.

- La nueva forma de presionar no está del todo asimilada. El Real Madrid de Benítez quiere subir mucho las líneas para ahogar a los rivales en su propio terreno de juego. Quiere recuperar los contraataques y las embestidas con espacios, por lo que necesita robar lo más arriba posible. Pero, de momento, los equipos contrarios salvan esa presión alta con relativa facilidad. El Madrid tiene la intención, pero al no robar esféricos cerca de la portería rival sufre cuando los rivales salvan su presión y se acercan al marco de Keylor Navas o Casilla. Por eso el Galatasaray tuvo muchas ocasiones. Deben mejorar en los robos.

- Fases de juego defensivo y aburrido. Como consecuencia de la incapacidad para robar balones, este Madrid, paradójicamente, es dominado por los contrarios cuando el camino que está buscando Benítez es controlar los partidos. Pero no dominarlos con una posesión contínua y de mucha circulación como en la era Ancelotti, sino un control basado en los robos constantes y los ataques rápidos. Un martillo pilón que juegue en campo contrario todo el rato y no deje respirar al rival. De momento, es habitual que los jugadores, al verse superados en su incapacidad para quitarle la pelota al equipo rival, pasen a posiciones defensivas en zona, esperando un fallo en el pase del jugador contrario. Este Madrid defiende 'mirando' en muchas fases de los partidos, algo que recuerda a épocas con versiones defensivas del equipo blanco, como con Fabio Capello. Eso no gusta nada al Bernabéu y habrá que corregirlo.

- Pulir el rol de algunos futbolistas. Gareth Bale es el jugador que más ha variado su posición y sus funciones con respecto al curso pasado. Ahora juega por el centro, de mediapunta y se pretende que tenga mucha más participación, así como que esté más cerca del área. Así mismo, otros tendrán que variar sus funciones: Isco o James jugarán por la derecha para ocupar el sitio dejado por el galés, y Cristiano y Benzema serán mucho más 'movibles' de sus posiciones habituales. Esto requiere tiempo de adaptación. El ataque también se está resintiendo de esto. Si Benítez logra sacar rendimiento de Bale en el medio habrá logrado explotar a la apuesta más cara e importante del club de los últimos años. De momento, el futbolista sigue sin arrancar.

- Decidir en puestos concretos. El lateral derecho será un quebradero de cabeza. Danilo es la apuesta y Carvajal un tipo que venderá su puesto de forma carísima. Tanto, que de momento el brasileño no mejora al canterano. Insistimos... de momento. Parece que Keylor es fijo bajo palos hasta que llegue De Gea y en el centro del campo, Modric y Kroos están lejos de su mejor forma. Habrá que decidir si dar entrada a Casemiro o incluso Kovacic en las primeras jornadas es recomendable. Y arriba está el dilema de Benzema. Por no mencionar a Isco y James. Benítez dejó entrever que el malagueño empezará como titular porque el colombiano aún no está a tope físicamente tras la disputa de la Copa América. Pero ambos volverán a protagonizar un interesante debate entre el aficionado.