Tres nombres pueden quedar sentenciados por Mestalla ante el Mónaco
La afición ha asistido a un verano extraño y convulso que ha terminado con la salida de Otamendi
El encuentro de ida de la previa de la Champions League entre el Valencia y el Mónaco acapara toda la atención en la ciudad del Turia a estas horas. El club che espera en vilo a la hora de inicio del encuentro para saber qué será de la entidad en lo deportivo a partir de los próximos días. Una enorme maquinaria económica y de gestión, base del proyecto de Peter Lim en el club che, depende en buena parte del éxito este miércoles.
Precisamente, las últimas decisiones adoptadas por Lim y también por el técnico, Nuno Espirito Santo, estarán sometidas a la valoración de Mestalla a partir de las 20:45 horas de la noche. La gente está muy centrada en el encuentro y es normal, pero si las cosas no van bien hay posibilidades de que el público empiece a pensar en todo lo que ha ido sucediendo este verano.
Y esto es, a saber: La polémica entre Amadeo Salvo y Rufete y la dupla Nuno-Mendes, con Lim de fondo y una complacencia hacia estos dos últimos que ha terminado con la salida de los dos primeros de la entidad, algo que no ha gustado a mucha gente; La sensación de que el súper agente tiene peso y mucho en las oficinas de Mestalla acerca de quién entra y quién sale de la plantilla sin atender a criterios estrictamente deportivos; Y, por último, un verano lleno de líos y rumores en el que no se han hecho grandísimos fichajes, se ha ejercido la opción de compra por nada menos que 60 millones de euros por dos jugadores cuyo rendimiento fue agridulce el año pasado (Negredo y Rodrigo) y la salida traumática de Otamendi, en contra de lo que se pretendía: Retener al grupo que iba a competir en Champions esta campaña para aspirar a más.
Con todo esto, si el Valencia gana al Mónaco y pasa a la fase de grupos de la Champions, no habrá problemas. La afición quiere resultados sobre el césped. Pero no pocos han censurado ya algunas decisiones adoptadas por la entidad en las últimas semanas y es sabido que Mestalla es de las plazas más exigentes de Europa.
Buena parte del proyecto y del futuro del Valencia está en juego esta noche. También el estado de alegría y confianza de la gente, que hace pocos meses se vio 'salvada' por la llegada del magnate de Singapur.