El vestuario del Barça 'sugiere' a Luis Enrique olvidarse de Sandro/ Munir
Rafinha, que no enamora, cuenta con mas apoyos en el grupo
El calentón de los pesos pesados del Barcelona era y es de aúpa. En Can Barça llueve sobre mojado. La salida de Xavi -no hay partido en el que Messi no se acuerde de él- a la que ha seguido Pedro baja el nivel de un grupo que dio un toque de atención a Luis Enrique tras jugar a hacer de entrenador en la Supercopa de Europa y la idea de la de España. A los 'capos' de la plantilla no les gustó un pelo, es más, afirma que ante el Athletic se perdió por ahí y que frente al Sevilla se jugó con fuego, los cambios en el once presentados por el asturiano. El vestuario tiene muy claro que este Barça son once jugadores contados y poco más, los variantes debilitan al equipo que sufre en el césped. Especialmente duros fueron los comentarios hacia Sergi Roberto, Sandro y Munir. Es por eso que antes la marcha de Pedro, primer recambio del enfermo Neymar, desde la plantilla se ha hecho llegar al técnico la conveniencia de alinear a Rafinha, el menos malo del banquillo, en detrimento de Munir/Sandro, relevos naturales en la posición vacante.
Los dos canteranos pueden tener su momento en el transcurso del encuentro, pero no han dado el salto de calidad esperado este verano a ojos del grupo que tiene muy claro quien funciona y quien no en el Barcelona. La última palabra será de un Luis Enrique que firmó sus mejores números cuando se dejó 'aconsejar' por la plantilla en la segunda vuelta, tras el 'aviso' de Anoeta.