Luis Enrique no quiere que le copien

No permite que los técnicos del fútbol base presencien sus entrenamientos para evitar filtraciones sobre situaciones como la del desafío de Leo Messi.

Luis Enrique no quiere que le copien

Cuentan los que conocen los secretos de cada ladrillo de la Ciutat Esportiva que Luis Enrique es muy celoso de su intimidad. Tanto, que no permite a los técnicos del fútbol base asistir a sus entrenamientos para evitar que copien sus métodos, que son muy suyos y se siente muy orgulloso de ellos. Así se entiende que de la misma manera que ha cerrado los entrenamientos a la prensa, táctica que instauró Pep Guardiola en su momento, tampoco permite que lo que hacen sus jugadores en los campos de entrenamiento sea visible para los demás, incluidos los propios técnicos del club.

Luis Enrique no quiere filtraciones sobre sus métodos que puedan llegar a la prensa, por eso ha prohibido la entrada en sus entrenamientos a los técnicos de los equipos inferiores del club que desearían unificar criterios en los métodos de preparación y esquemas tácticos de manera que los chavales puedan ir creciendo de acuerdo a unos sistemas comunes en todo el club de acuerdo a la filosofía implantada por el técnico del primer equipo. Luis Enrique prefiere hablar personalmente con los técnicos del fútbol base y explicarles lo que quiere de ellos o remitirles a un manual publicado en el que expone sus ideas sobre los entrenamientos, pero no cede en el tema de que compartan sus métodos como entrenador.  La medida no ha gustado entre los responsables técnicos de los equipos inferiores, que ven en la actitud de Luis Enrique una clara muestra de desconfianza.

Es evidente que existe un problema de comunicación entre Luis Enrique y quienes deberían ser sus ayudantes, aunque parece que él no los ve de esta manera. A pesar de la presencia de un psicólogo de confianza en el cuerpo técnico, Joaquín Valdés, no parece que la comunicación sea el punto fuerte del entrenador asturiano. Ha tenido problemas de comunicación con Leo Messi, mantiene discrepancias exageradas con el gremio de la prensa y ahora se suma esta falta de sintonía con quienes deberían ser sus hombres de confianza. Uno de dichos técnicos ha confesado a Don Balón que el origen de este desencuentro podría estar en evitar que nadie pueda ser testigo de escenas desagradables como la que en su momento se produjo cuando Leo Messi desafió su autoridad delante de todos los demás.