Los éxitos (y algún 'pero') de Rafa Benítez tras 100 días en el Real Madrid
Ha conseguido orden táctico y que se defienda bien. Mantiene la calma en el vestuario... pero todavía se enfrenta a muchas dudas
Rafa Benítez se enfrentará este sábado al Espanyol como técnico 'centenario' en el Real Madrid... y es que cumple 100 días al frente del conjunto blanco. De momento es un periodo corto, en el que apenas se pueden sacar grandes conclusiones más allá de las intenciones que tiene el técnico con respecto al equipo, a lo que pretende sacar de los futbolistas en el plano táctico y, sobre todo, a sus mensajes para con el conjunto de la plantilla, que son distintos a los que se han venido manejando en la casa blanca durante los últimos tiempos.
"Tengo que sacar lo mejor de cada jugador de la plantilla". Esta promesa incluye una responsabilidad complicada por parte del técnico, ya que casi nunca se ha caracterizado el Real Madrid por ser un club que aproveche al máximo el potencial de sus plantillas. La calidad y el peso de los titulares suele hacer que los onces iniciales varíen muy poco y que los entrenadores se vean obligados a alinear siempre a los cracks del equipo porque eso es lo que espera el club y sus aficionados, con la consiguiente repercusión deportiva y física en el plantel. Benítez, un hombre muy dado a las rotaciones, anuncia un cambio.
Esto ya ha provocado debates intensos acerca del rol y la importancia que pasarán a tener determinados jugadores a partir de ahora. Figuras como Isco, James Rodríguez o Carvajal han sido algunas de las señaladas por haber sido relegadas a la suplencia en los primeros partidos oficiales de la temporada. Comentarios surgidos por la poca normalidad de la situación, que se unen a los otros 'problemas' que Benítez está teniendo que afrontar desde que se sentó en el banquillo: Una máxima destinada a sacar el mejor rendimiento posible de Gareth Bale, muy cuestionado la pasada campaña y que es la apuesta del club y de su presidente, Florentino Pérez, para liderar al equipo en los próximos años. Veladamente, un sustituto de Cristiano Ronaldo a largo plazo. Y, añadido a esto, la sequía que ha acompañado al astro portugués en sus primeros días de esta temporada.

De momento, Benítez está empeñándose en colocar a Bale como mediapunta por el centro, algo que sólo dio un resultado realmente decente y positivo en el último partido del equipo blanco ante el Betis en casa (5-0, con dos goles del galés). Su 'recolocación' sobre el pasto ha generado un aluvión de comentarios y críticas acerca de las facilidades del club hacia el futbolista para que explote en relación con otros miembros de la plantilla; Benítez, pese a todo, ha mantenido la calma para ir puliendo poco a poco los defectos del jugador adaptado a una nueva posición y va mejorándolo en este aspecto. Es de esperar que Bale rote como los demás, sobre todo si sigue sin cumplir con las expecativas. Un tema por el cual muchos permanecen en silencio 'esperando' a ver qué hace el entrenador en los próximos meses.
Y conjuntamente a todo, Rafa Benítez ya puede decir que es 'centenario' en otra cosa característica en el Real Madrid: su relación con la prensa y con el debate constante en torno al club. Estos primeros días suyos al frente del banquillo no han sido fáciles. La salida convulsa de Iker Casillas, la renovación de Sergio Ramos o la no llegada de David de Gea tras un intenso verano son episodios por los que ha tenido que dar la cara como 'portavoz' del club cuando muchos aficionados los consideran culpa del presidente, saliendo, hasta ahora, airoso de cada situación. Muchos le ven como un peón del palco, y otros esperan que mantenga la independencia necesaria que tan famoso le hizo en sus mejores días al frente de clubes complicados como el Valencia o el Liverpool. Le queda camino por recorrer.