A Peter Lim se le rebela (también) la afición además de los accionistas

La afición del Valencia tiene hambre de Champions. Después de estar dos temporadas fuera de la máxima competición continental, el conjunto de Mestalla afronta de nuevo con ilusión la competición, aunque la directiva parece que quiera mantener a régimen a la hinchada che.

El equipo que hoy dirige Nuno Espírito Santo se deshizo del Mónaco para entrar en la fase de grupos. Así, el Valencia tiene la oportunidad de ampliar su historia en su regreso a la Champions, pero parte de la hinchada no lo podrá disfrutar y aquí vienen las quejas del respetable.

Muchos abonados se han quedado sin poder activar el descuento al abono para los tres partidos de la Champions. El plazo acabó el pasado 4 de septiembre, pero ante el desconocimiento por parte de la gran mayoría de la afición ante la escasa información, las protestas se han multiplicado, llegando a exigir el libro de reclamaciones como forma de expresar su descontento.

El 'Matador', contra Lim

Y a Peter Lim empiezan a crecerle los problemas. Y al descontento de los accionistas por la estrecha relación que mantiene con el agente Jorge Mendes, se une está política sobre las entradas para la Champions.

Varios accionistas del Valencia solicitarán al consejo de administración una auditoría que recoja detalladamente las cifras exactas que ha pagado por cada uno de los nuevos jugadores y un ‘guru’ del valencianismo como Mario Kempes fue rotundo: “No me gusta cuando estos empresarios se quieren hacer dueños de los clubes. Me parece una tontería enorme que lo hayan permitido, porque los entrenadores y los empresarios no me gusta que controlen los clubes. Eso lo tienen que hacer otras personas. Pero el dinero manda, es muy poderoso”.

Precisamente, para apaciguar los ánimos Lim quiere traer al Valencia un regalo por Navidad en forma de fichaje: Ander Herrera.