Lucas Hernández no se va: El central español que ocupará su puesto en el Bayern (y afecta al Madrid)

Lucas Hernández no se va: El central español que ocupará su puesto en el Bayern (y afecta al Madrid)

Su precio se dispara.

El interés por Lucas Hernández se acrecentaba a medida que iban pasando los partidos, y el Cholo Simeone atento a esta situación, puso toda su sapiencia para convencer al jugador de que se mantuviera en el Atlético de Madrid para continuar con ese ascenso vertiginoso que viene experimentando durante esta temporada, previniendolo de que si salía de la institución existiría el riesgo de encontrar obstáculos que le ralentizaran su ascenso.

 

Pero no solo Hernández ha demostrado un crecimiento importante, por su parte el Espanyol de Barcelona tiene una joya que esta temporada ha incrementado su valor de manera sorprendente. El rendimiento de los dirigidos por Rubi, anclados en una sólida defensa que tiene como protagonista principal a Mario Hermoso, le ha permitido al central ganar crédito suficiente para ser convocado por Luis Enrique a la selección española y a su vez despertar el interés de grandes equipos.

El principal club que ha mostrado la intención de hacerse con los servicios del central madrileño, es el Bayern Múnich, ven en él mucha categoría para los cruces, velocidad y capacidad para salir jugando, permitiendo un primer pase limpio, virtud fundamental para equipos como el alemán que basan su juego en un dominio territorial permanente a lo largo del partido.

 

Es importante resaltar que el Real Madrid estaba considerando la posibilidad de fichar al defensor, teniendo como punto a favor la opción de recompra por 7,5 millones de euros, aunque dicha cláusula no se ejecuta de forma automática al pagar al club, ya que el futbolista debe estar de acuerdo con el contrato que le ofrecen.

 

Hermoso iría al Madrid solo en caso de poder ser titular, situación que luce complicada en la actualidad con centrales como Ramos y Varane. El Bayern tiene una gran billetera y estaría dispuesto a pagar una gran cantidad de dinero para terminar de convencer.